Mentiras

Capítulo 19.

Para Taemin fue incómodo estar en la casa de los padres de Min Ho cuando su esposo se fue esa mañana y él tuvo que compartir el desayuno a solas con los demás Choi porque sentía que ellos sabían lo que hicieron la noche anterior y no sólo eso, sino por todo lo que su matrimonio estaba pasando, porque él no iba a decir que después de la noche anterior las cosas estaban excelentes entre ellos, porque no era así, aunque quería pensar que era un gran paso el que habían dado, porque cuando despertaron esa mañana lo hicieron abrazados y Min Ho le había sonreído, pero las sonrisas era algo común ahora mientras lo intentaban.

Notó como poco a poco la mesa de desayuno se iba quedando sola porque cada quien iba a su trabajo, aunque Min Ho fue el primero en irse cuando él ni siquiera iba en la mitad del desayuno porque dijo que tenía que pasar por el apartamento cambiándose de ropa, y Taemin quiso dejar de comer, sin embargo cuando su esposo le pidió a su madre que consiguiera un taxi para él cuando quisiera irse fue bastante claro que debía quedarse, aunque Lee hubiese preferido irse con su esposo si cuando éste se fue comenzó a sentirse incómodo, como si todos sus problemas estuvieran expuestos, porque el día anterior si algo se estaba saliendo del tema Min Ho fue el que no permitió que todo llegase a lo que ellos tuvieron que pasar antes de estar ahí juntos en aquella casa.

Se quedó en silencio mientras al terminar de comer, esperando que la mamá de Min Ho también lo hiciera porque después de eso él pensaba en irse, sin embargo los planes de la señora Choi eran otros, ya que cuando ella acabó de comer le sonrió dulcemente, y se mostraba muy emocionada con tan sólo haber sonreído.

—Estuve pensando —habló la mujer sin apartar la mirada de él —ya que no tienes que regresar al apartamento de inmediato, que nosotros podríamos ir de compras, ya sabes, yo también quiero que mis nietos tengan mis regalos. ¿Qué te parece?

Taemin se movió un poco incómodo en su asiento, porque él planeaba irse después del desayuno y eso porque Min Ho lo había dejado ahí, sin embargo la idea de comprar cosas para sus bebés le gustaba, y lo único que opacó aquel momento era recordar que después de que compraron las cosas para su bebé no nacido las cosas se complicaron, perdió a su bebé y meses después Min Ho lo engañó con personas que él tuvo que escuchar cada noche y verlas a la mañana siguiente. Apartó cada recuerdo e incluso los de su bebé, y no porque quisiera olvidarlo, porque nunca lo iba a hacer, era su hijo, fue parte de él durante tantos meses, lo amó mucho, sin embargo creía que ese instante era de los bebés que crecían en su interior.

Asintió y escuchó a la mamá de Min Ho decir que sólo subiría a arreglarse y que después ellos podrían salir de compras, que no demoraría, que estaba en su casa y que él lo sabía, sin embargo Taemin sólo se levantó del comedor agradeciéndole a una de las empleadas que comenzó a retirar los platos, y se fue a sentar en el sofá para esperar a que la mujer bajase. Ahora que lo pensaba creía que necesitaba distraerse, y sabía que iba a disfrutar comprando las cosas para sus bebés, así como lo fue en el pasado cuando compró las cosas con Min Ho, porque nada de lo que ahora pertenecía a sus hijos lo había comprado pensando en ellos, sino en aquel ser no nacido, pero ellos también merecían tener su momento, que los amara con la igual intensidad con la que amó a su otro bebé.

***

Taemin observaba las diferentes ropas que la mamá de su esposo quería comprar, y a él también le gustaban, sin embargo no creía que fuera prudente que le comprase vestidos a sus bebés cuando no sabían su sexo, pero la mujer había insistido que ella creía que eran niñas, y él no discutió acerca del tema, porque eran los regalos de sus bebés, aunque él todavía no pensaba que comprar vestidos fuera buena idea porque si sus bebés eran niños aquellos regalos se quedarían guardados, y más si la mujer los compraba en gran cantidad.