5♥

2.1K 123 6
                                    


*** POV ANNIE***

El fin de semana fue demasiado rápido para mi gusto, pero lo bueno de todo esto es que la semana estaba próxima a terminar, lo malo es que todo el mundo caminaba deprisa por los pasillos con tesis, proyectos a medio terminar, tazas de café en sus manos... exámenes cada día. Pero lo bueno de todo esto es que vienes las vacaciones de verano y con ellas un respiro.

Por otro lado estoy algo desanimada Jefferson me ha estado evitando cada que me ve, y cuando simplemente intento iniciar una conversación contestaba muy seco, la verdad es que no entiendo que es lo que está pasando, me duele que se comporte de esta manera porque es una persona muy especial y sé que quiere algo más que una amistad conmigo pero no quiero herirlo, le he dicho miles de veces que la mujer indicada para el se encuentra esperando por él.

Justo en este momento voy saliendo de mi prueba de Química, así que voy camino a cafetería a buscarlo, quiero solucionar lo que sea que le haya hecho. Miro por todos lado en busca de su persona hasta que doy con el pero este se encuentra por la parte de afuera de cafetería. Camino por el pasillo de cafetería hasta salir por la puerta que da directo al área verde. Ahí está el, tan indiferente con una mirada vacía y triste, dando lentas y lastimeras caladas a su cigarrillo a lado de un árbol.

-Jefferson – lo llame, voltio a verme, en sus ojos podías ver lo mucho que no ha dormido y su mirada llena de dolor.

-¿Qué haces aquí?- pregunto a la vez que apagaba su cigarrillo y haciendo que el aire se dispersara para no dañar mi estado.

-Necesitamos hablar- dije intentando acercarme a él.

-No tenemos nada de qué hablar, Annie – por más molesto que estuviera el jamás, había dicho mi nombre de esa manera.

Comenzó a caminar lejos de mi alcance, pero no estaba dispuesta a que nuestra amistad terminara de esta manera sin saber la razón se su aislamiento conmigo, porque sabía que con sus amigos seguía normal y solo cuando me veía o estaba cercas de él se alejaba, así que tome fuerte su brazo.

-Tú, no vas a ningún lado – me miro incrédulo por mi acción repentina- Tenemos que solucionar esta mierda que tenemos de no hablarnos ... más bien de no hablarme tu – estaba tan molesta conmigo de no poder entender o saber qué es lo que pasaba por su cabeza.

- De acuerdo – asintió, espero a que lo soltara y así lo hice.

Miro a un lado y vio una banca de madera negra, me indico que lo siguiera, caminamos hasta estar frente a ella y él fue el primero que se sentó, palmo su mano aun lado de el, tome asiento con una distancia prudente para verlo a la cara.

-Ni siquiera sé cómo empezar – su postura rígida con una mirada en el suelo.

-Solo hazlo, Sabes que siempre voy a estar para ti – intente animarlo para que sacara eso que le molesta y lastima.

- Ja, Ese es el problema Annie – su risa forzada, mientras sus manos iban directo a su cabello despeinándolo con rudeza – Sabes lo que siento por ti y sé que no soy correspondido – empezó a hablar mientras miraba el edificio frente a nosotros – Muchas veces trataba de convencerme que tu solo eres mi mejor amiga y que nada de lo que yo haga para llamar tu atención como mujer iba a funcionar...

-No tienes que hacer esto si no quieres – Sabia a donde iba esto y no quería herirlo más de lo que ya parecía.

-Tengo que hacerlo , por favor – su mano se poso en mi rodilla, su tacto fuerte y tembloroso delataba que tanto lo deseaba hacer – El verte cada día por los pasillos con esa sonrisa solo hacía que me enamorara cada vez mas de ti ver como tu bebe crecía hacia que me sintiera lleno de orgullo ... pero sabía que no podía tomar el lugar de su padre bilógico por más que quisiera y el día que volviste a ver el padre de tu hijo hizo que me enfureciera mucho pero lo que jodío mas que un puto golpe fue ver como en su mirada reflejaba ese amor que sentía por ti, el arrepentimiento y el valor de querer recuperarte. Ese día me di cuenta que ya no puedo hacer nada por intentar conquistarte, se que lo amas a él y que te niegas a aceptarlo - sus ojos intentaban alejar las lagrimas de un hombre derrotado – Pero es más absurdo seguir con algo que se que jamás seria mío y de mi corazón, por eso mi actitud, Annie – su voz intentaba pasar ese inmenso nudo que le impedía hablar.

Mi Perdición,Mi Salvación y Mi Locura (Trilogía Curvas Impredecibles #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora