¡Papá Sorpresa! [Edición Harry Styles]

7° _______ Wagner

Me sentí tan mal después de decirle todas esas palabras a Harry que casi le ruego de rodillas que me perdonara. Yo misma me juré que jamás guardaría rencor por cómo sucedieron las cosas, nunca le diría que me dolió y me sigue doliendo que él no me amara como yo lo hacía, aun después de 7 años.

Darcy estaba incomoda comiendo con nosotros, no quería que fuera así. Se supone que a ella no le debería afectar ninguna de mis decisiones, se supone que todo lo hacía por ella. Pero hasta ahora lo único que eh hecho es volverla una desconocida con su padre. Era mi orgullo o su tristeza.

-asique… ¿Dónde queda el zoológico? – pregunte interrumpiendo 20 minutos de silencio. Mi hija tenía ese brillo en los ojos que hizo que mi corazón sonriera.

- en Regent’s park.- sonrió alegremente. Termino su cereal con leche y lo fue a dejar en la cocina, dejándome sola con Harry.

-de pasada podemos ir a tu disquera – susurré. No quería ser hipócrita y hacer como si hace 30 minutos no le allá echado todo en cara. Me miró agradecido, pero no supe porque.

-sí, creo que podemos. Pero preferiría hacer eso mañana. Hoy podríamos dedicarlo solo a pasar tiempo en familia,

Sonreí a medias, no sabía si algún día seríamos una familia completa. Solo esperaba que Harry de verdad pusiera de su parte y me demostrara que era un adulto, que podía querer y cuidar de Darcy.

Darcy volvió y se paró antes de sentarse en la mesa nuevamente. Dudo por un momento y luego con timidez se aproximó a Harry.

-supongo que como ya todos saben de mí, te puedo llamar “papá” cuando yo quiera, ¿verdad? – preguntó dando pequeños pasos hasta pararse frente a él. Se me encogió el corazón con sus palabras y creo que a Harry también. Sus ojos muestran dolor y culpa, pero también había cariño y adoración. Me devolvió las esperanzas.

-oh, cariño, lo siento. – respondió, la tomo en brazos sentándola en sus piernas abrazándola, como siempre imagine que sería. Sentí ganas de llorar. No quería que te tomaras eso tan literal. Ya empezaba a molestarme que me llamaras así.

******

Unas horas después nos encontrábamos comiendo en la cafetería del Zoológico de Londres, unas papas fritas con mayonesa. Reíamos de los chistosos que son los chimpancés. Estaba feliz por Darcy, por fin se cumplía su sueño. El sueño que yo le había negado, pero que intentaba reparar. Después de comernos todas las papas seguimos mirando ahora a los animales nocturnos.

Entramos a una cueva donde todo estaba oscuro y no se podía sacar fotografías, nos animales estaban en cajas a 1.50 de altura, por lo que Darcy no podía ver nada, pero la solución para eso estaba en su padre. Harry la tomo en brazos y así vimos a los búhos, murciélagos, etc.

Cerca de las 6 de la tarde empezamos a caminar a la salida. Paseábamos como personas normales, éramos invisibles hasta que alguien me tiro de la chaqueta, instintivamente mira hacia abajo pero no era un niño perdido era hombre con una cámara. Solté su mano de mi chaqueta y seguí avanzando hasta alcanzar a Harry junto a Darcy. Pero sentía su presencia atrás y luego un nuevo clic se escuchó seguido de muchos más y luego toda la gente parecía notarnos.

-ignóralos, solo camina – me susurró Harry al oído tratando de ignorar todos los gritos y el revoloteo seguimos caminando al estacionamiento. Pero justo en la entrada se pusieron muchas chicas con celulares reclamando atención.

-¿Cómo podría ignorar eso? – pregunté con humor. Había pensado en esto en la mañana, ahora se cumplía, pero no era la culpa de Harry, por lo que era mejor tomárselo con humor, por lo menos ahora.

Por lo menos 12 chicas estaban tapándonos el paso. Harry tomó a Darcy en brazos y tratamos de pasar abriéndonos el paso, mientras llegaban más y más. Una de ellas me piso, otra me jalo el cabello y yo no dije nada, pensé que era mejor hacerlo pasar por un accidente. Seguí con esa mentalidad hasta que una niña empujo a otra que hizo que yo casi callera y le pegara al costado de Harry conde estaba Darcy tapándose la cara en su hombro, Darcy se tambaleo afirmándose de mi para no caer.

Pare de caminar y me dirigí a la chica que me había empujado.

-¿Cuál es tu problema? – le pregunté. Ella me miró entre asustada y feliz. Pero no dijo nada solo se quedó allí. Decidí que no era importante y seguí caminado. Harry no me esperaba seguía caminado con Darcy segura en sus brazos. Mentalmente lo agradecí.

Eso era responsabilidad. Tenía que lograr llegar al coche y dejar a Darcy a salvo.

-ni siquiera se parecen. Esa chica solo lo está engañando – susurró una chica morena a mi lado. Debía tener unos 15 años. ¿Qué sabía ella? La ignore de nuevo. Quedaban solo unos metros hasta al coche no me iba a parar a explicarle toda mi vida.

Cuando por fin llegue, Darcy ya tenía el cinturón abrochado y estaba viendo los recuerdos que habíamos comprado en la parte de atrás. Me senté con ella.

-¿estás bien? – le pregunté. - ¿Dónde está Harry?

-mi papá está hablando con alguien, creo que para salir del zoológico. – respondió. Miré por el parabrisas y lo vi hablando con un hombre de negro y macizo. Miré nuevamente a Darcy. – estoy bien, mamá – me leyó el pensamiento – no estoy asustada, esto será algo normal. Debería ver los conciertos.

Sonreí ante la aparente alegría de Darcy, y la abrace besándole el cabello.

*****

-lamento lo de esta tarde – dijo Harry sentándose en la silla frente  a mí. Dejé mi taza con café en el plato y lo miré.

-está bien. Debemos, más bien debó – me corregí al recordar que Darcy ya lo había asumido – aprender a controlar esto. Es que se crea demasiado caos, y tenía miedo de que alguien nos lastimara.

-no dejaría que eso pasara.

-pero son cosas que no contralas. Eso trato de decirte. No te disculpes más por cosas que no están en tu poder, eres noticia ahora. Tal vez hay que esperan a que se pace todo esto y volveremos a salir.

-tienes razón – susurró comiendo un pedazo de pan. Sonreí y de pronto me puse nerviosa y empezó a girar la tara entre mis manos.

-bueno hay otra cosa que quiero decirte – dije. El asintió – hoy no te importo nada más que sacar a Darcy de todo eso y llevarla al coche. Lo eh visto.

El parecía aturdido.

-juro que pensaba dejarla allí y ayudarte a salir… - empezó diciendo. Negué y le interrumpí.

-no es malo, es fantástico. A eso me refería cuando dije: “primer y último pensamiento” has hecho lo correcto.

-eso quiere decir que he ganado puntos – sonrió.

-sí, has ganado puntos.