Llamale vano,
Pero me enamoré de tu cuerpo,
De esas curvas que trazan mi vida,
Y ese sur que me controla por completo.
Mi norte siempre fue tu sur,
Y en el encarne el éxtasis en su realidad inmortal,
¿Quién fuera yo, para desvanecer encima de ti?
Y, ¿quién fuera el tiempo para hacerse nada? Con nosotros,
Junto a mi,
Tú siendo más que mía,
Y yo aferrada a ti.
Y es que ¡Dios!
¡Como amo la anatomía humana!
¡Como me encantas mujer!
Un poco de lo mucho que amo el cuerpo femenino.
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EVLOGÍA
PoetryUna bendición no tan deseada, y un talento inexistente. Sólo los recuerdos y el sentimiento de una simple persona igual que tú. Con un dulce dolor, y una historia que contar... Por supuesto, la constancia no la conoce, y el valor mucho menos, pero a...