Capítulo 19

220 14 3
                                    

Siempre me decían que el amor te hace hacer locuras y cosas que nunca harías. Yo asentía, siempre asentía y siempre les decía que tenían razón, pero en realidad no tenía ni idea de lo que hacía el amor. El tiempo ha pasado, yo he crecido y he ido viendo que todas esas personas tenían razón en lo que decían. El amor es una locura.

Cuando soy consciente de lo que estoy haciendo y de quién tengo en frente de mis narices, me siento la peor persona del mundo. Miro a Dylan, que está con la misma expresión que tengo yo en estos instantes. Estamos los dos sin saber qué hacer. Damon nos acaba de pillar enrollandonos. Me dije a mí misma y me prometí que nunca haría daño a Damon. Quiero a Damon, mucho. Siempre ha sido muy buen chico conmigo, me ha tratado como a toda chica le gustaría ser tratada, me ha demostrado muchas cosas y nunca me ha hecho daño. No quiero perder a Dylan, pero tampoco quiero perder a Damon. No está enfadado, se lo noto en los ojos. Está decepcionado, y le entiendo. Espero aquí sentada a que nos diga algo, pero lo único que hace es pegar un largo suspiro y salir de la habitación cerrando la puerta tras él.

—Mierda—dice Dylan mirándome.

—Mierda—grito y rápidamente me levanto para ir tras Damon—Esto ha sido un error.

Cuando digo eso, abro la puerta de mi habitación y le encuentro caminando hacia su habitación. Corro hasta llegar a él e intento pararle agarrándole del brazo. Al principio se niega, pero vuelvo a insistir y se gira para mirarme.

—Damon, lo siento mucho. No sé que estaba pensando. Por favor, no te enfades.—le suplico—Solamente ha sido un error, por favor, Damon.

—Alissa, no pasa nada.—me dice consiguiendo mantener una tierna sonrisa mientras me mira a los ojos—Se perfectamente lo que sientes por Dylan. Lo sabía desde que empezamos a hablar. Sabía que te sentías muy a gusto conmigo, al igual que yo, pero también sabía que hacía que te olvidarás de tus problemas, sobretodo de Dylan. Quería verte bien, no quería que te pasaras un año entero llorando por él. Sé que nunca llegaste a olvidarle, y cuando me enteré de que había vuelto, supe que lo nuestro no iba a llegar a más. Y lo entiendo. No estoy enfadado para nada.

—Damon...—empiezo a decirle sin saber muy bien que decir, pero me interrumpe y le escucho.

—Escuchame. Lo hemos pasado muy bien juntos y nos hemos conocido muy bien el uno al otro, pero tu corazón no es para mí. Estoy seguro de que él te quiere. Yo también te quiero, te quiero mucho Alissa. Siempre serás muy especial para mí y siempre podrás contar conmigo para lo que quieras—una lagrima cae por mi mejilla al oírle decir estas cosas—No te preocupes por mí, solo quiero que me prometas que siempre serás mi amiga y que podré contar contigo.

—Por supuesto que sí, Damon. Yo... te quiero mucho, de verdad. Eres tan bueno, Damon—le digo y se le escapa una risita—Gracias por tratarme así de bien y por entenderme. Siempre seremos buenos amigos, te lo prometo.

Cuando termino de decirle lo que le quería decir, le abrazo con todas mis fuerzas y él me devuelve el abrazo. Estamos varios minutos así, hasta que decide soltarme y decirme antes de irse:

—Y ahora, ve con Dylan e intentarlo una vez más. Dale una oportunidad.

—Gracias, Damon. Por todo—le digo y le vuelvo a dar un abrazo. El solo me sonríe y se vuelve para dirigirse a su habitación y yo a la mía, donde Dylan me espera sentado en la cama con la cabeza entre sus manos.

No me esperaba para nada la reacción que ha tenido Damon al vernos a Dylan y a mí enrollandonos. Engañándole. Doy gracias por que haya tenido esa reacción en vez de otra, sí, pero me siento muy mal. Me siento mal, porque yo no soy así. Yo no engaño a la gente, no les hago daño. Me da mucha pena que se haya acabado eso que tenía con Damon, pero me ha prometido que siempre seremos amigos y que siempre podré contar con él para lo que sea, así que me alegro por eso. Creo que ha esto se refería Amansa cuando me dijo que el tiempo pondría todo en su lugar. Mi corazón solo pertenece a una persona, y me he dado cuenta que esa persona es justamente el chico de ojos verdes que tengo justo delante mío al entrar en la habitación.

Al verme, se levanta rápidamente y me pregunta qué ha pasado. Le cuento todo lo que me ha dicho Damon, y se alegra al momento.

—Me ha dicho que siempre seremos buenos amigos.

—Es un buen chico, ¿verdad?—me pregunta sonriéndome.

—Lo es.

Entonces, nos miramos a los ojos y enseguida sabemos que es lo que va a pasar a partir de ahora. Estamos a pocos centímetros de distancia y yo solo quiero besarle los labios.

—Alissa, quiero intentar esto otra vez.—me dice mientras toma de mi mano y empieza a acariciarla y a darle pequeños besos.

—Yo también. Te he echado muchísimo de menos todo este año.

—Te quiero—me dice, y sin dejarme tiempo para contestar pega sus labios a los míos y me olvido al instante de todo lo que me rodea. Solo somos él y yo.



Os quiero chicos!

Never loved youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora