Mantequilla de Maní » Larry Stylinson

Capitulo 19

Tuve que buscar quien me llevará a casa de Harry, termino siendo Niall. El cual estaba aburrido en clases y decidió ayudarme.

—Eres un buen novio

Me sonrojo, no lo soy. Solo trato bien a Harry, supongo. Harry merece que lo traten bien, toda su vida ha estado tras las sombras esperando con ansias que alguien decida darle afecto, y aceptación. Yo le doy algo mas que ambas; cariño, ternura y atención. Además; la perdida de ellos es mi ganancia.

—No me considero buen novio, Ni — digo encogiendo mis hombros — me considero una persona, probablemente, enamorada

¿Enamorado, yo? Sí, lo estoy. Y no vale de nada que siga diciendo algo que no siento. Siento mariposas idiotas revoleteando en mi barriga solo con una mirada suya, siento ganas de darle lo mejor porque él se lo merece, podría besarlo durante días y no comer, y sobreviviría. También ganas de protegerlo, y tenerlo a mi lado aunque la sensación de que algún momento se ira, y de que me dejara no me abandona, puedo pasar de ella. Harry me quiere, al menos le gusto. Lo se, lo veo en sus ojos perfectamente verdes.

—¿Enamorado?

La confusión de Niall me hizo sonreír.

—Enamorado, Ni — aseguro sonriendo — Harry es lo mejor que me ha pasado luego de lo que paso con Jacob. Amarlo, y tenerlo a mi lado es todo un privilegio

—Cursi

—Envidioso — Niall hace una mueca sonriéndome, luego nos ponemos a escuchar una canción en silencio

La casa de Harry sorprendió a Niall. Este tuvo su boca abierta hasta que toque el timbre. Abriendo al parecer Dora, la nana de Angie. Le sonrió mientras Niall sigue con su expresión de sorpresa.

—Busco a Harry

—Oh, sí. El joven Harry me dijo que le dejara pasar — ella sonríe viéndose realmente joven, me hace un ademán para que ambos entremos

Nos conduce a la habitación de mi chico, cuando Niall me detiene.

—Esto es asombroso — dice, y yo le sonrió asintiendo — pero debo irme, no quiero ser la tercera rueda

—No lo eres, Ni — digo queriendo calmar sus dudas pero el niega

—No me molesta, en serio. Resuelvan sus cosas, y hagan cosas cochinas — me guiña un ojo ante de bajar por donde mismo vino

Dora abre la puerta dejándome ver a un Harry en calzoncillos, apretados y roncando levemente. Sonrío, Harry luce tan bonito, tan vulnerable, suave y perfecto.

—¿Y el joven rubio? — pregunta con confusión, y yo le sonrió

—Se fue, no te preocupes conocía la salida — ella asiente dejándome solo para que entre cuando este listo

Entre, pegándome a su torso y poniendo mi rostro a la altura del suyo. No tiene la sabana por encima del cuerpo, y una suave capa sudor lo cubre. Toque si frente, notando la fiebre. Arde, parece que lleva rato así.

—Harry, despierta — lo muevo, no ta fuerte, no quiero despertarlo del malhumor — cariño, arriba — se removió, pero no se levanto, gruño cuando no se despierta — ¡Harry, mueve tu gordo trasero de la cama!

Harry abrió sus ojos bastante grandes pero luego los cerro, tomando una gran bocanada de aire. Y bufo, luciendo molesto.

—¿Como te sientes? — pregunto, tocando por encima su cuerpo, notando su calor corporal

—Me sentía bien, hasta que un loco entro y me despertó — gruñe, bufo y digo:

—Tienes un fiebre bastante alta, y luces como un muerto — espeto, y él bufa sentándose en su lugar — ve al baño, y báñate con agua fría. Mientras yo iré a prepararte una buena sopa de pollo, siempre funciona