Real & Inmortal 2 (Camren)

Capitulo 33

 -¿Lauren?... ¿Lauren, estas bien?- preguntó por tercera vez al ver la mirada perdida de la joven, sacándola de sus recuerdos.

Lauren durante todo este tiempo había mantenido la mirada fija en aquella pintura, principalmente en una esquina del cuadro en donde una pequeña firma con las iniciales "LMJM" eran casi imperceptibles. Sintió como su estómago se revolvía mientas eran acompañadas por reacciones de arcadas. Salió de la habitación con rumbo a un baño, no sabía en donde se encontraba uno, así que abrió la primera puerta que vio y para su suerte logro llevar a tiempo al inodoro. Camila la siguió entrando con ella, viendo como las arcadas atacaban con fuerza causando que Lauren vomite todo lo existente en su estómago. No dudó en acercarse, sujetando su cabello, evitando que lo manche, lo movió despacio descubriendo su cuello notando algo que por segunda vez en tan poco tiempo volvió a llamar su atención. Después de cinco minutos, las arcadas se habían terminado pero la preocupación de Camila seguía presente.

-¿Te sientes mejor?- preguntó intranquila.- Si quieres pudo llamar a un doctor para...-

-Estoy mejor.- sonrió tenuemente apoyada contra la pared frente al inodoro, esperando que las náuseas hayan cesado por completo. –Creo que la comida no me hizo bien.- se encogió ligeramente de hombros. Mintió.

-Iré por un poco de agua.- dijo saliendo del baño sin esperar respuesta alguna. Después de unos segundos la pequeña regresó y le ofreció el reconfortante líquido a la mayor. Lauren bebió el líquido sintiéndose un poco mejor, sin embargo el dolor de los recuerdos la estaba destruyendo.

Hace demasiado tiempo que había dejado de recordar, había encontrado la manera de atrapar sus recuerdos pero ver ese cuadro solo había causado que todo lo que llevaba dentro escapara. Cerró los ojos y respiró profundo evitando que sus ojos se cristalicen.

Camila la miraba, miraba como su respiración era agitada, como sus ojos se mantenían cerrados mientras su mano sujetaba con fuerza el vaso de cristal, creyendo que en cualquier momento lo rompería. Desconocía lo que sucedía pero necesitaba tranquilizarla, tal vez conversar con ella ahuyentaría los problemas, aunque sea por unos minutos.

-Me sigues sorprendiendo.- murmuró con una ligera sonrisa, provocando que Lauren abriera los ojos y la mirara confundida.

-¿A qué te refieres?-preguntó suavemente mientras dejaba el vaso sobre el lavamanos.

-Tengo un cepillo de dientes, si lo deseas.- ofreció.

-Eso sería de mucha ayuda.- respondió mirando como la pequeña buscó una pequeña caja que le entregó y abrió de inmediato para deshacerse del mal sabor de boca. Al terminar de cepillarse, tomó un poco de enjuague bucal y se refrescó el rostro.

-Jamás imaginé que fueras una chica de tatuajes.- habló luego de mucho rato, confundiendo a su acompañante.

-¿Qué?- preguntó mirándola por el espejo, deteniendo sus manos que sujetaban la pequeña toalla con la que secaba su rostro.

-Tienes una libélula en la parte posterior de tu cuello.- Lauren abrió los ojos como platos, sintiendo que las lágrimas volvían a amenazar. Cerró los ojos de inmediato.- ¿Qué representa?- preguntó sin darse cuenta de las acciones de la mayor. Lauren dudó en contestar, suspiró profundo y respondió rogando porque su voz no se quebrara al hablar.

-Nana.- su simple respuesta hizo sonreír a la pequeña.

-¿Te lo hiciste por Nana?- preguntó feliz.- ¿Ella lo sabe? Estoy segura se enojó contigo por hacértelo.- Auch, aquellas palabras sin duda no las esperaba. Sintió su corazón latir con fuerza mientras otra arcada volvía a atacarla, respiró profundo sujetándose del lavamanos, las lágrimas ya no eran sostenibles en este punto.- ¿Lauren?- llamó suavemente quedándose tras su espalda. Lauren abrió los ojos y Camila se encontró con su mirada, descifrando miedo y dolor en ellos provocando una sensación de angustia recorriendo su cuerpo.- ¿Lauren?- volvió a llamar.