Capitulo 47

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-¡¿Qué carajos significa esto, Lauren?!- gritó, dando pasos firmes para acercarse.

-Camila... Camila yo...- Lauren tartamudeó mientras se levantaba.

-¡¿Tu qué?! ¿Tú puedes explicármelo? ¿Eso es lo que dirás?-

-Camila dej...- silencio. Sus palabras murieron al sentir la fuerte bofetada que empezaba a arder en su mejilla izquierda.

Lauren permaneció con los ojos cerrados mientras su corazón dolía mucho más que su mejilla.

-Te odio, Lauren.- fue la segunda vez que escuchó esa palabra venir de la pequeña y aun así dolió tanto como la primera vez.

-Camz...- murmuró sin levantar la mirada del suelo.

-Pudiste evitarme todo este dolor con tan solo decir la verdad. Pudiste matar mis estúpidas ilusiones con tan solo rechazar las clases de piano. Pudiste...-

-¡Sé que pude!- cortó de inmediato.- ¡Sé que pude decirte que había tomado clases de piano en Inglaterra! ¡Sé que pude decirte que amo tocar, pero que no permito que nadie me escuche! ¡Sé que pude decírtelo!- dijo mientras sus ojos se cristalizaban.- pero no quería hacerlo...-

-¿Qué?-

-Podía estar contigo y eso era lo que más deseaba.- dijo mientras se acercaba suavemente a la morena que la miraba fijamente sin ninguna expresión en su rostro. Camila permaneció inmóvil, permitiendo que Lauren se acerque lo suficiente, permitiendo que coloque la mano sobre su mejilla.- Te amo, Camila y si fingir que no podía tocar el piano, era la manera de quedarme contigo, lo volvería a hacer una y otra vez.- Camila la miró mientras colocaba su mano sobre la mano de Lauren.

-¿Quieres saber por qué te odio?- dijo suavemente forzando una sonrisa de lado. Lauren la miró atónita.-Te odio porque eres una jodida egoísta.- su mano retiró la mano de Lauren de su rostro. -Te odio por quererme para ti, por darme esperanzas de algo que claramente no iba a pasar. Por pensar en ti y tus malditos sentimientos, pero no en mí y lo mucho que me lastimas. Tú no me amas, Lauren, de lo contrario no te casarías mañana con una persona que no soy yo.-

-Camila, mi papá...-

-Tu padre no es el dueño de tu vida, Samuel no es el dueño de tu vida, yo no soy la dueña de tu vida. Lauren TU vida te pertenece y TU decides que hacer con ella.-

-Las cosas no son tan fáciles...-

-Lo son.- refuto de inmediato.- Y lo serán desde ahora.- dijo haciendo un intento por salir, pero la mano de Lauren sujetando su muñeca se lo impidió.

-Si sales por esa puerta, algo me dice que no te volveré a ver.- Camila sonrió con ironía antes de girar y encontrar los ojos verdes a punto de soltar las lágrimas que mantenía con fuerza.

-¿Qué quieres de mí, Lauren?- preguntó con incredulidad.- No quieres que me marche, pero estas a unas cuantas horas de contraer matrimonio. ¿Acaso esperas que sea tu dama de honor? ¿Planeas que sea la tía de tus hijos? O ¿quieres que seamos amantes? - se burló.- Tú eres una jodida egoísta.- escupió las palabras con lentitud.- Y yo merezco mucho más que eso.-

-Sé que te hago daño.- aceptó.- pero...-

-Pero te vale una mierda.- completo la frase.

-No, no es así.- respondió de inmediato.- he intentado por todos los medios alejarme de ti pero estas, incluso en aquellos lugares en donde creería imposible tu presencia. Yo no puedo dejar de amarte y no puedo sacarte de mi corazón porque fuiste el amor de mi vida y yo no quiero...-

-Son solo recuerdos, Lauren.- cortó suavemente.- Esto ya no es amor.-

-Camz.- suplicó.- Por favor no dudes de mi amor por ti, es de lo único que estoy segura.-

-Puedes decir que me amas, pero las palabras pueden mentir y las acciones se pueden improvisar.- dijo tristemente. -Yo... debo irme.- terminó antes de acercarse a Lauren para darle un tenue beso en la mejilla antes de caminar hacia la puerta.- Felicidades por la boda.- dijo mientras salía del departamento, dejando a una morena totalmente perpleja.

Cansada. Creo que esa es la palabra adecuada para describir como se sentía en este momento. Ya no más peleas, ya no más dolor. En unas horas partiría de vuelta a New York y todo volvería a la normalidad. Solo unas cuantas horas más.

Caminar nunca le había parecido tan tranquilizador, y pese a las altas horas de la madrugada y los peligros inminentes de la tétrica noche, caminar ayudó a su alma. Tardó cerca de una hora en llegar a casa y al hacerlo, fue atacada por dos preocupadas chicas que la interrogaron en cuanto puso un pie en el departamento.

-¿Qué rayos ocurre contigo? ¿Sabes lo preocupadas que estábamos?-

-80 llamadas perdidas. ¡Para qué sirve tu maldito teléfono si no lo vas a contestar!-

-Llamé a la policía diciendo que habías desaparecido pero los muy incompetentes me dijeron que debíamos esperar 72 horas hasta poder reportarte como desaparecida.- hablaba Dinah con el teléfono en la mano, mirando a su amiga caminar tranquilamente por el departamento.

-No puedes hacernos esto, Mila.- pidió Normani.

-¿Acaso planeas que te coloque un chip localizador?- preguntó con furia siguiendo a la pequeña hasta la cocina mientras Camila tomaba un poco de agua.- ¡Porque juro por Dios que lo hare!-

Dinah se acercó para tratar de encontrar su mirada pero al hacerlo, se llevó una inesperada sorpresa.

-Camila, ¿estuviste bebiendo?- preguntó preocupada. El olor a alcohol se hacía más fuerte conforme disminuía la distancia entre ellas.

-Camila, habla con nosotras.- suplicó Normani. La idea de que su amiga pudiera volver a caer en el alcohol las hizo estremecerse de sobremanera. Ambas conocían todo el infierno que Camila tuvo que pasar para salir de ese mundo y pensar que las cosas podrían repetirse solo hizo que el miedo incrementara de forma inmediata.

Camila volvió a salir de la cocina y se encaminó hacia las escaleras seguida por las dos chicas tras su espalda.

-Estoy cansada y quiero dormir. Buenas noches.- fue todo lo que dijo antes de subir a su habitación.

Dinah y Normani se quedaron de pie, totalmente confundidas y muy preocupadas al ver a su amiga y el poco interés que mostró hacia la conversación pero sabían el motivo de su estado así que respiraron, se tranquilizaron y volvieron a sus habitaciones sin nada más que puedan hacer por ahora.

Real & Inmortal 2 (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora