Ya estaba en la casa de Louis, había llegado hace como media hora. Aunque no me había atrevido a entrar, en ningún momento. Porque tenía miedo de cómo reaccione al verme, pisando su propiedad. El temperamento de Louis subiría por los cielos y la casa se vendría en llamas. O solo estaba exagerando un poquito... Quería pero no quería entrar;era inevitable, tenía que sacrificarme y entrar. Yo había cometido esto y era justo que yo lo fuera a arreglar. Sino le hubiese contestado de esa manera, y le hubiese hablado tranquila explicandole las cosas como eran, habría terminado muy diferente esta situación. Pero las cosas son por algo y ahora tengo que aguantarmela.
Quiero decir... tengo que tranquilizarme e ir calmada, así arreglamos todo juntos. Para que salga todo perfecto, y no salten chispas en la casa.
Tomé aire y me metí rápidamente, sin siquiera pensarlo. Había pasado una semana desde nuestra pelea. No me había atrevido a venir antes, es que no podía creer que yo haya hecho eso. Mejor vuelvo ¡No Camille, tu te quedas aquí y afrontas lo que te toca! Ay Dios, soy demasiado bipolar a la hora de hablar en mi cabeza. Vamos, yo sé que puedo hacerlo. Empecé a caminar, mis piernas temblaban del miedo y mis manos sudaban demasiado. Caminé, mis pasos se escuchaban en el vacío del terrible silencio que había en la casa, y no paré hasta llegar a la puerta de su despacho.
Se escucharon gritos desde adentro y pude reconocer su voz. "Demonios Tatiana, ¿no puedes hacer. una cosa bien?" Me quedé paralizada, ahora con más miedo de entrar"Todo lo tengo que hacer yo, yo y yo" Cada vez, él gritaba más fuerte. Toqué la puerta con mis dedos, inspiré y abrí la puerta... Ahora si, todo estaba en silencio.
Louis me miraba indignado, sin poder creer que yo me atreva a entrar en su casa, sin permiso. Y Tatiana, me miraba con rostro agradecido por hacer que pare. Sus ojos brillaban tanto, y tenía la respiración agitada, creí que me iba a alabar por completo y besar mis pies, por interrumpir esa discusión tan agresiva. Nunca lo vi tan, pero tan enfadado.
-¿Cómo te atreves a entrar a esta casa?- se dirigió a mi-¿Con qué derecho?- se acercó y yo lo enfrenté. Estaba un poco más toreandome, tan enfadado que creería que me echaría a patadas de su casa.
-Louis, tenemos que hablar-dije con mi voz determinante y él se empezó a reír. No entendía nada
-¿Hablar nosotros?- preguntó con una expresión divertida- Porfavor Camille, si hubieses querido hablar conmigo... lo hubieses hecho cuando estaba en tu casa, tratando de que me contestaras-me reprochó con su rostro oscurecido- Y no me hubieras cerrado la puerta en la cara-Escuché unos pasos salir del despacho, cerrar las puertas y ahí fue cuando quedamos completamente solos.
Quedamos en silencio. Nos miramos los dos desafiandonos, ninguno hablaba pero la tensión que había en el ambiente era muy fuerte. Y sabía que no iba a durar mucho esta pelea, o ¿si? Esta vez yo rompí el silencio.
-Si no hubieses sido tan terco-dije recalcando la última palabra- no lo hubiese hecho- desafié más su mirada y una comisura se me levantó. Veía que él no estaba resistiendo.
-Soy como se me da la gana Camille, si no te gusta... ahí tienes la puerta para retirarte- dijo apuntandome con su mano la puerta.-Es más, te invito a que retires-dijo cínico
-Louis, porfavor- suplicante lo miré-No seas así, se que no quieres esto- me crucé de brazos
-Quiero que te vayas de mi casa y no te atrevas a pisar ni un pie, en tu vida ¿Entendiste?- me miró serio y severo- Ni se te ocurra volver a mirarme, hablarme o siquiera respirar, cuando estés cerca mío. Porque lo pasarás mal sinó- me acerqué a su cara, muy desafiante y pronuncié una sola palabra que desató todo.
-Pruébame- me tomó de los hombros y me empujó, llevandonos a los dos contra las puertas de su despacho. Me miró fijo y, repentinamente, me besó. Nos estabamos besando, no estaba entendiendo nada. Pensaba que me iba a echar de la casa, no pensé que iba a resultar esto. Pero yo le seguí el beso. No quería que esto sucediera así, quería una conversación real entre nosotros dos. No quería más que nos escaparamos y no seguir discutiendo. El beso se estaba tornando más fogoso, y mis piernas ya temblaban pero no por el miedo... sino por deseo. Y como no quise que eso pasara, paré bruscamente.
-Louis, no evitemos el tema- él respiró agitado y la miro desconcertado.
-Okay- dijo con los latidos fuertemente andando-Pero hablemos más tarde- me volvió a besar y morder el labio, muy sensual. Me estaba provocando demasiado. Pero yo paré nuevamente, porque sabría que si no lo hacía, no podría nunca más.
-Ahora- bufó y asintió. Me dio la silla y yo me senté. Suspiré y me acomodé los mechones de mi cabello, que me estaban molestando.
Miré cómo se iba hasta su asiento y luego me miró, esperando a que le hable...
-Creo que hemos sido muy inmaduro los dos- dije apoyando los brazos en su escritorio.-
-Creo lo mismo-dijo un poco más calmado- No hemos tomado buenas decisiones...
Era el momento más tenso que había tenido con él, porque hablar con él no es fácil. Nos quedamos por un rato en silencio, sin saber que más decir. Estabamos esperando que alguno diga algo y rompa el hielo nuevamente, pero ambos sabemos que somos muy orgullosos para hacerlo. Pero vamos Cam! No te quedes callada que tu viniste para arreglar las cosas con él. Louis me miró intensamente y me puse más nerviosa, él me ponía muy nerviosa.
-¿Podemos empezar denuevo?- él dudó pero luego estuvo un tiempo pensando, hasta que finalmente sus comisuras se levantaron. Y su rostro demostraba que estabamos en paz. Yo sonreí.-¿Si?
-Okaaay... Creo que yo he sido un poco exagerado también- respondió-
-Y yo...-nos miramos-No me gusta pelear contigo- bajé la mirada. Estaba muy estresada y triste. Enserio no me gustaba pelear con él. Cada día que paso con él, hace que se vuelva más importante para mí. Han pasado dos semanas desde que volvimos de Doncaster y he estado pensando acerca de nosotros. Creo que ya estoy preparada para tener algo más importante con él.
-Yo creo que...-miró al techo,suspiró y después miró mis ojos- cada vez que nos peleamos, cometo los mayores errores de mi vida, porque eres lo único que no quisiera perder nunca.- lo miré sorprendida y me levanté de mi asiento bruscamente, rodeé su escritorio muy rápido y lo abracé muy fuerte, uniendo mis labios con los suyos. La silla se movió un poco para atrás por el impacto y Louis, un poco sorprendido, me sostuvo y luego me abrazó.
Era muy difícil que Louis Tomlinson le diga eso a una chica. Nunca se lo había dicho ni a Eleanor ¿Cómo lo sé? Astrid es muy chismosa y vivió mucho tiempo con Louis... me contó que a Eleanor la quería demasiado pero no para llegar a ser tan cariñoso con ella. A veces parecía una relación muy falsa y plástica, hasta a veces tóxica. Ella lo mandaba a él, y él obedecía, pero que él seguía teniendo sus límites. Pero que muy dentro, él si la quería y que le haya sido infiel, le rompió el corazón.
Volviendo a donde estabamos en un principio... Besé a Louis con mucho cariño hasta quedar sin respiración. Lo abrazaba para no poder separarme de él, y yo no veía que a él le molestara, porque me hacía lo mismo y me unía cada vez más a él, asi no quedaba ningún mínimo de espacio entre nosotros.
Me mordió el labio y me sonrió, me apretó más, pero esta ve unimos nuestras frentes y respiramos, tratando de volver a tener oxígeno en nuestro sistema. También sonreí... porque esto me hacía darme cuenta cuanto lo quería y necesitaba. Cada vez que estamos juntos, me hace darme cuenta que cuando él no está a mi lado, soy inútil.
-Te quiero Camille Azura...-lo miré un poco severa, pero reímos porque ambos sabíamos que no me gustaba que me llamaran por mi segundo nombre- te quiero tanto que duele cuando no te tengo cerca- respiró ondo y exhaló- y me duele tanto... tanto cada vez que nos peleamos, porque no sé si llegarás a soportar algún capricho mío cuando te vas o yo me voy por alguna pelea- me quedé en silencio y lo dejé seguir hablar, porque literal, me había dejado sin habla- y que nunca vuelvas a hablarme o me abandones- suspiró-Soy un hombre difícil, lo sé muy bien.-lo agarré de su rostro.
-Últimamente, es muy difícil abandonarte-dije sonriendo y él levantó una ceja- Es muy tarde para hacerlo, ya te volviste parte de mi vida.- me mordí el labio y miré su rostro, él sonreía.
-Esto que voy a preguntarte me parece muy de adolescente, pero ¿Quieres ser mi novia?- me sorprendí- Si todavía no estás lista lo comprendo, pero necesitaba preguntartelo y...-no lo dejé seguir y lo besé nuevamente.
-Si quiero idiota- reí y nos volvimos a besar. Nos juntamos más y él me alzó, y corrió todos sus pertenecias del escritorio para poder dejarme ahí y seguir besandome.
Cada vez se volvía más fogosa la situación. Pero ninguno de los dos nos ibamos a separar, esto se estaba volviendo fuego y me encantaba. Me hizo acordar a una conversación que tuvimos una vez. Y si que terminamos quemandonos.
-No te conviene jugar con fuego nena- se levantó y se puso frente a mí desafiante-No tengo miedo a quemarme- dije descaradamente en doble sentido
-Ya veo- levantó una de sus comisuras y se fue acercando de a poco- Yo tampoco
Ese día me acuerdo que le había dicho indirectamente, que había mejores que cuerpos que el de Eleanor, todavía me sigo riendo de la situación.Louis me apretó más a él e intensificó más el ambiente. Tenía mucho calor por dentro y cosas en mi estómago que me molestaban demasiado. Él siguió hasta empezar a besar mi cuello y sucsionarlo. Me mordí el labio y respiré agitada. Me apretó más y gemí, porque empezó a morderlo y me había acercado a su bulto que empecé a sentir cada vez más duro. Le rasguñé la camisa con mis uñas y mi cabeza se fue para atrás, dejando más camino para que jugara con mi cuello. Enredé mis piernas en su cadera y él después me llevó al sillón más alargado así se recostaba junto a mí, mientras seguía con mi cuello. No aguanté más y le agarré el rostro, para que pudieramos seguir besandonos. Le lamí el labio y lo mordí. Se empezó a frotar en mí, me estaba excitando carajo, él si sabe cómo jugar. Se sentó y ahora yo quedé encima suyo, comencé a frotarme en él y besarle su cuello y apoyó su cabeza en el sillón. Gemía y mordía su labio, lo que me hacía sonreír porque significaba que le estaba encantando.
Esto es algo nuevo para mí, tuve algo parecido con Alex pero nada que ver a esto. Esto era muchísimo mejor e iba mejorando de a poco. No soy una experta, pero puedo con esto.
Seguí frotandome, su bulto cada vez estaba más duro y protestó para que nos volvamos a besar, porque agarró mi cuello e iba de a poco acercando nuestros labios. Nos mirabamos a los ojos, hasta que impactaron nuestros labios nuevamente. Quedamos así por varios minutos, hasta que nos separamos. Y respiramos.
-Wow-dije cerrando los ojos y respirando entrecortada
-Esto es más que eso- rió e hizo lo mismo.
Nos miramos y, me di cuenta, que tenía sus pupilas muy dilatadas.
-¿Quieres quedarte hoy a dormir aquí?-asentí sin pensarlo, su pecho subía y bajaba- Genial- me dio un besito.
-Voy a avisarle a Harry- él asintióHola mis hermosas lectoras, espero que les haya gustado este capítulo, si un poco fogoso. Estaba un poco inspirada y hacía mucho que no hacía un capítulo así. Perdón si a muchas no les gusta este tipo de capítulos.
Quería avisarles que ya publiqué mi primer capítulo de la novela que estoy trabajando, es solo para mostrarles de qué se va a tratar masomenos la historia. Cuando termine esta historia, que ya no falta mucho, creería yo... voy a subir ya capítulos de la novela nueva. Se llama Hold me, y pueden buscarla en mi perfil. Espero que cuando lo lean, si es que están interesadas, les guste.
Bueno ya no hablo más. Las quiero mucho y besotes enormes👄
-💫xMagicPlace💫
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📰Soportando A Mi Jefe📰 L.T.
RomanceCamille Armstrong tiene una historia que contar ¡Sobre todo relatar cómo es estar al mando de una persona realmente odiosa! Extrañamente no sabe porqué sigue trabajando para él.