Aris Sprause
— Hemos estado buscando por tres horas y no hay resultado. Parece como si se hubiera evaporado— le informo a Daniela, quien se encuentra recostada en el barandal de una terraza encima de uno de los edificios del pueblo.
Sus codos encima de dicho barandal y sus piernas cruzadas levemente sobre el suelo mientras el aire del pueblo acaricia su cabello y lo alborota me indican que mi hermana se encuentra en un estado de transición. Piensa en lo que hará a continuación ahora que su mente se encuentra un poco más relajada, ya que hace un momento, cuando el olor de la sangre de su amiga llegó a nuestras fosas nasales, la chica destruyó con furia la mayor parte del club. Algo que tendremos que pagar y después llamar a algunos contactos para que esto quede como un accidente. No es la primera vez que tratamos de ocultar este tipo de rastros.
— Los hombres lobos no harían tal cosa y las hadas son muy pacíficas. No se ocurriría otra ser que no fuera ella, y ahora eventualmente se pierde— ríe un irónicamente—. Es evidente, ¿No?
— No tienes pruebas que la criminen y sabes que no somos del tipo de familia que toma acciones sobre las personas inocentes que no han demostrado lo contrario— recrimina mamá a mis espaldas. Luke y Julián están sentados al lado contrario de Daniela, mientras que Lydia y Papá están a mi lado izquierdo con sus brazos cruzados, pensado en lo que ha sucedido.
Dani se voltea al instante, haciendo que su vestido dance con ella. Sus ojos marrones eventualmente son invadidos con un aura roja hasta pasar a ese color y brillar con una gran intensidad. Está furiosa, un estado que yo nunca antes había visto.
— ¡Fue ella, estoy segura!— exclama con ira—. Que el pueblo estuviera normal y luego, con su llegada, sucedieran dos muertes casi consecutivas es la prueba.
— Eso no es una prueba, es una suposición. No podemos actuar a base de eso— objeta papá, para luego agregar con una suave voz: — Sé que era tu amiga...
— ¿Una amiga?— interrumpe la castaña—. Susan era más que una amiga para mí, era como otra parte de mi familia. Que ustedes nunca la hayan visto así, no es mi culpa.
— ¿Y eso qué, Daniela? La furia sólo está provocando que digas cosas irrelevantes e inútiles. No podemos ir a matarla sólo por el hecho de que es lo que sientes— dice Lydia con una dura voz—. Además, si seguimos tu lógica de los recién llegados, Adam también es alguien nuevo en el pueblo. Y todo el mundo aquí sabe que su olor no es algo usual, ¿Por qué no desconfiar de él, en vez de hacer esta fiesta supuestamente para conocerlo?
— Porque él estaba con nosotros cuando eso sucedió— le explico antes de que la castaña se le lance a Lydia en un ataque de desesperación—. Además, Thomas ha estado muy cerca de él. Tan cerca, que no sé cómo debería sentirme al respecto.
— ¿Y qué con eso? No es que confíe mucho en un Waters— menciona la chica de cabello azul y yo le lanzo una mirada de advertencia antes de que prosiga con su sermón. Ella capta lo que quiero decir y simplemente le lanza una de sus miradas frías e irrompibles a Daniela, y sé que lo que viene no es bueno: — Prácticamente nos obligaste a hacer una celebración a la cual no estamos acostumbrados para simplemente conocer a un chico que es extraño en todos los sentidos, pero en realidad lo único que lograste fue perder a una verdadera amiga. Espero que afrontes las consecuencias de tus caprichos.
— ¡Lydia!— le regaña mamá, pero ya era muy tarde.
Ya yo me encontraba en medio de Daniela y Lydia con mis dos manos en sus pechos para que no comenzaran una batalla que no iban a terminar sin dejar algún herido. La castaña mantiene sus ojos rojos en ella mientras que Lydia aún se mantiene firme en su sitio.

ESTÁS LEYENDO
Prometo encontrarme © (Completa)
VampirAdam Houchein perdió a su padre en un incendio de su antigua casa cuando apenas era un niño y desde entonces vive con su madre Elizabeth Houchein y su Tía, Samantha Clambet, en la gran ciudad de Nueva York. Su infancia y parte de su adolescencia la...