Capítulo trece.

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#Narra Ryu.

Cuando llegamos a la cima de la montaña ya casi estaba atardeciendo. Guie a DaeHyun y Dara a la cabaña en la que años antes mi hermana y yo nos habíamos estado ocultando de los humanos hasta que pudimos controlar nuestra sed de sangre.
A los pocos segundos aparecieron Sara, JongUp y Min.

- ¿La suele pasar eso a menudo? –pregunté al ver que Min estaba inconsciente.
- Pues creo que cada vez que se pone muy nerviosa –dijo JongUp dejándola en el sofá que había en el salón.
- ¿Pero se la pasara? –preguntó Dara bajando de la espalda de DaeHyun.
- Supongo que sí, su corazón sigue latiendo y respira con normalidad –dijo Sara sentándose a los pies del sofá.
- Dejadla un rato –dijo DaeHyun.

Miré a mi hermana y las dos salimos a la parte de delante de la casa.

- ¿Crees que aquí estarán a salvo? –la pregunté.
- No, vayan donde vayan van a estar en peligro. Si la amiga de estas chicas nunca ha probado la sangre y ahora se le han activado los sentidos vampíricos para pararla les va a costar más de lo que creen –dijo un tanto triste- Sabes qué significa eso.
- Si –asentí- Una de las dos acabara muriendo.
- Por mucho que las protejamos –dijo.
- Por mucho que esos chicos no quieran perderlas –dije.

Dolía pensar que una de esas dos pobres chicas iba a acabar muriendo en las manos de una de sus mejores amigas, y que uno de ellos haría lo posible por vengarse.
Nos quedamos allí quietas, mirando al bosque que nos rodeaba, no se oía nada.

- Ninguna de ellas va a morir –dijo JongUp detrás de nosotras- No vamos a permitirlo, y si de verdad queréis protegerlas haréis lo que sea por ellas.
- Claro que lo haremos… -dije- Pero tampoco quiero morir yo.
- No vas a morir boba –dijo mi hermana- No voy a dejar que te pase nada, ni a ti ni a ellas.

Poco después de que DaeHyun también saliera a la parte de delante se dejaron de oír a los pájaros y eso no era buena señal.
El silencio era absoluto, nuestros sentidos vampíricos se habían puesto en alerta. Ninguno de los cuatro se movía, Min seguía inconsciente y DaeHyun había avisado a Dara de que no se moviera.

Vimos como una bandada de pájaros se alejaba del bosque todos juntos, y oímos un ruido sospechoso en el fondo del bosque.

- Están aquí –dijo Sara en un susurro.
- Luna para, no puedes hacer esto –se oyó una voz grave acercándose.
- Déjame, voy a matarlas –contestó una chica.
- Luna, son tus amigas –se oyó a otra voz.
- ¿Ellos no quieren matar a las chicas? –pregunté al oír la conversación que venía desde el bosque.
- No lo sé –dijo DaeHyun- Al principio si…
- Parece que ahora no, la única que sigue es Luna… -dijo JongUp- Sus sentidos vampíricos se han agudizado tanto que la están afectando, y hasta que no acabe con una de ellas no va a poder parar. Por mucho que nosotros lo intentemos.

Vimos aparecer a Luna de entre los árboles, iba a bastante velocidad. Sara se colocó delante de nosotros, empezó a correr y con un simple movimiento de brazo dejó a Luna en el suelo. No tardamos ni un segundo en llegar donde estaban ellas y sujetar a Luna entre los cuatro.

- Soltadme –dijo Luna gruñendo.
- Pensamos que no ibais a poder con ella vosotros dos solos –dijo un chico acercándose a toda velocidad a nuestro lado.
- Tú –dijo JongUp agarrándole del cuello- ¿Cómo fuiste capaz de convencerla para que acabase con ellas?
- Todo empezó como una broma –dijo casi sin poder respirar- Pero ella empezó a preguntar más sobre que se sentía al tomar sangre humana, no sé qué la dio –dijo.
- YoungJae… -apretó.
- Vale, no solo fue una broma… Nos venía bien a nosotros también... para poder porfin probar su sangre –dijo.
- Yo te mato –dijo DaeHyun.

Ahora solo Sara y yo teníamos agarrada a Luna, y nosotras no teníamos tanta fuerza como ellos dos.

- Soltadme –dijo Luna.

Red [B.A.P]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora