Touch (Newtina)

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Newt:
Ya había pasado 2 semanas y Tina no le hablaba a Quinnie y ni ella a Tina.
Estas semanas han sido toda una locura.
Tina tiene demasiado trabajo y los animales han estado muy locos, así que no hemos tenido tiempo a solas.l
Ella llega muy cansada y luego ni siquiera hablamos. Y eso no me gusta.
Así que decidí que hoy la sorprendería en el trabajo. Le llevaría un pastel de la pastelería de Jacob.
Cuando llegue a MACUSA no la encontraba, me dijeron que había salido, así que me fui a la cafetería a esperarla. En eso llega Abby.
-Hola Newt- se sentó a mi lado.
-Hola- la salude.
Ambos nos quedamos callados.
-Newt- interrumpió bruscamente el silencio.
-Dime-
-Bueno, no quiero sonar muy aventada, pero.... quería saber si querías hacer algo hoy- se sonrojó. Yo solo reí.
-Perdón Abby, pero tengo novia-
-¿¡ como que tienes novia, quién es!?-
-Pues es Tina, Tina Goldstein- de solo pensar en ella me pierdo.
-mmmm Popertina Goldstein, que suertuda es-
-No yo soy el suertudo de tener a alguien como ella en mi vida-
Tina:
Me mandaron a checar el area donde hubo un asesinato de dos duendes, cuando regrese vi a Newt a lo lejos, y para mi suerte estaba hablando con Abby.
Decidí acércame y escuche que Newt dile contesto.
-No yo soy el suertudo de tener a alguien como ella en mi vida-
Eso fue muy dulce.
No me pude resistir y lo abrace por atrás dándole un beso en la mejilla.
-¡Tina!- se levantó y me abrazo.
-Bueno, creo que me ire, newt ten mi número y si cambias de idea márcame- no lo puedo creer, todavía que estoy yo presente ella hace su movimiento, que tenga algo de descendía por favor.
le guiñó un ojo y se fue.
-Newt ¿que haces aquí?-
-Pues te vine a ver. Estos último días ya ni nos saludamos de tan ocupado que están y extrañaba tu aroma- me abrazo.
-Ven vamos a casas- lo tome de la muñeca.
-Pero tu trabajo-
-Eso mañana lo veo, por hoy ya acabe-
Nos dirigimos a casa. El camino fue más largo de lo común. Ya que el no paraba de detenerse y darme besos. También se detuvo para comprarme flores.
Cuando por fin llegamos a casa. Entramos, todo estaba vacío de costumbre.
Esta vez decidí tomar la iniciativa, así que lo jale hacía mi y lo empece a besar. El me tomo de la cintura y me acerco más a el.