Narra Ximena:
-¡Hora de levantarse mini perras! -grité haciendo que todo el mundo se despertara-.
-¿Qué mierdas pasa? -dijo Yahir-.
-Si queremos despejar el interior del refugio, será mejor que empecemos ahora -respondí-.
-Antes hay que comer -dijo Reno sobándose la panza-.
-Si, es cierto. Necesito agua -dijo Kristel-.
-¿Dónde está la comida? -dijo Luis-.
-No lo sé, yo necesito municiones, me quedan cuatro balas -dijo Mario-.
-A mi sólo un cartucho -dijo Isbak aún recostado-.
Todos miramos a Tonalli que era el encargado de traer la bolsa.
-¿Qué me ven? -se escuchaba un poco nervioso Tonalli-.
-¿Tonalli? -dijo el Sr. Secretario- ¿dónde está la bolsa con comida? -.
Puse mi mano en su hombro- ¿Tonalli? -pregunte sonriendo-.
-Eh... Yo... Creo... que se quedó ¿en la camioneta? -dijo cubriéndose el rostro para que no lo golpeara-.
-Okay, entonces sólo iremos a la camioneta y la abriremos, los demás despejaran el área mientras sacamos la comida y lo otro -sugirió Isbak-.
-Chicos... Creo que no es así de sencillo... -volvió a responder Tonalli-.
-¿Por qué? ¿Te cagaste en los pantalones? -cuestionó Reno- Tranquilo, me ha pasado, a todos nos ha pasado -.
La habitación se quedó en silencio, todos miraban raro a Reno
-Total -dije- ¿qué es lo que sucede ahora? -.
-Las llaves están en la camioneta, putitas -dijo Tonalli, relajado para colmo-.
-¿olvidas la comida y las llaves, y te atreves a llamarnos "putitas", putita? -dije furiosa-.
-¡¡Hijo de puta!! -dijo Luis más furioso que los demás y se abalanzó sobre Tonalli golpeándolo-
-¡A ver, ya Luis! -dijo Mario separando a ambos- Lo último que necesitamos en este apocalipsys es pelar entre nosotros-.
Escuchamos un ruido en la parte baja de la bodega, bajamos y vimos una ventana rota, ya que la puerta aún seguía bloqueada.
-¿Pero qué carajo? -dijo Mario un tanto asombrado-.
-¿Oigan, y Tobit? -preguntó Isbak-.
-No están sus cosas -comentó Kristel algo enfadada-.
-No...mames... -susurró Renato-.
-¡Yo les dije! -exclamó Tonalli- no había que confiar en él, seguro se llevo la comida -continuó poniendo excusas-.
-¡Cállate mierda! -dijo Yahir-.
-¡Tú olvidaste lo poco de comida que teníamos! -dijo Kristel
-Ya dejen de quejarse, mejor vayamos a buscar a Tobías -dije-.
Narra Kristel:
Me sentía enfadada, y sedienta, claro. Pero no podía creer que el tal Tobit nos hubiera robado. Digo, entiendo que no podemos confiar en nadie, o al menos ahora lo hago.
-Ahí está -gritó el Sr. Secretario-.
Todos vimos a Tobit doblando la esquina con algo cargado en su espalda, todos corrimos y Luis lo alcanzó, dejándolo acorralado.
-¿A dónde mierdas vas? -preguntó un poco furioso y frustrado-.
-Creí que querían comida, estoy llendo directo hacia allá -.
-Conoces algún lugar, lo sé, lo siento... -cuestionó Reno calmando a todos-.
-¿Qué carajo estás diciendo? -dijo Ximena-.
-Él, él conoce un lugar y lo siento, mi presentimiento creció cuando el apareció, como si estuviéramos conectados, sé que suena algo muy loco y poco original, pero así me siento -.
-Okay, okay. Si conozco un lugar -respondió Tobit- es sólo que no les dije porque no quería que fueran unos aprovechados y me robaran y le contaran a alguien más sobre lo del lugar, en estos tiempos no se puede confiar en nadie, hay que sobrevivir como sea -.
-¿Qué es eso en tu espalda? -preguntó Renato-.
-Bueno, creí que a tí te gustaría esto -se dirigió a Kristel y le dió una katana-.
-¡O por dios!-gritó Kristel-.
Ayer no parabas de ver mi espada, así que creí que te gustaría una parecida -explicó Tobit-.
-¿¡Osea que aparte de comida tienes armas!? -gritó Yahir-.
-No, ¿acaso creyeron que me arriesgaría a que me robaran todo?-dijo Tobit- sólo tengo esa katana y un cartucho de balas, necesitamos despejar el refugio para conseguir mas balas, comida y gasolina -explicó-.
-Primero llévanos a donde dices que hay comida -dijo Isbak-.
-Solo síganme -dijo Tobit mientras caminaba-.
Narra Mario:
Llegamos a un mini súper, casi no quedaba mucho, la gente al entrar en pánico tomó todo lo que pudo. Logramos conseguir 3 latas de atún, 3 de frijoles y 4 de verduras, aunque yo odio las verduras.
-A ver, denme toda la comida,-dijo Kristel-.
-¿Por qué? -preguntó Tonalli-.
-Porque tu la pierdes y Kristel sabe como administrar la comida -dijo Ximena-.
Continuamos caminando por el súper y encontramos unas cuantas medicinas, las cuales me quedé yo, pues antes de todo esto estudiaba medicina.
-Bueno, eso es todo lo que había -dije-.
-Tenemos que aprovechar el día -dijo el Sr. Secretario-.
-Aún tenemos pocas balas, y el refugio seguro tiene todo un arsenal -dijo Luis- ¿¡Kristel, no pudiste traer mas balas!? -preguntó un poco enfadado-.
-A ver, no es mi culpa que ustedes no hayan comprado mas -explicó- ¡además cuando vi la alerta entre en crisis! -exclamó-.
-No van a conseguir nada peleando -dijo Ximena-.
-Eso es lo último que necesitamos -dijo Reno- hay que movernos ya, con suerte hoy podremos pasar la noche en el refugio -explicó-.
Narra Isbak:
-Necesitamos sacar las cosas de la camioneta -dije-.
-¿Pero cómo? -dijo Mario-.
-La putita de Tonalli dejó todo adentro -dijo Luis-.
-Y ahora cómo abrimos la camioneta?-preguntó Yahir-.
Todos empezaron a pensar en como entrar a la camioneta, cuando de repente Tobit rompió uno de los vidrios.
-Qué listo -dijo Renato-.
Entré en la camioneta y tomé la bolsa de comida.
-¿Dónde dejaste las llaves? -le pregunté a Tonalli-.
-En el asiento -me respondió dudoso-.
-No están -dije desesperado-.
Empezó a buscar en sus bolsillos y adivinen qué.
- ¡Aaah no, aquí las traigo! -dijo sorprendido-.
-¡Qué pendejo! -grito Luis mientras le daba un sape-.
Narra Renato:
Cuando pudimos sacar todo de la camioneta, nos paramos frente a la puerta del refugio, dispuestos a dejarlo vacío. Empezaron a llegar cada vez más y más de esas mierditas, el ruido al romper el vidrio los atrajo, pero no oíamos a ninguno de ellos adentro.
Con pánico y con Kristel entrando en una crisis, corrimos hacia la puerta, pero nos detuvimos cuando 2 chicos abrieron las puertas.
ESTÁS LEYENDO
OBAMACALIPSYS
Science FictionUn grupo de chicos se enfrentará a un suceso apocalíptico, a medida que pasa la historia se van enfrentando con diversos problemas, algo estúpidos y sin sentido, con un poco de comedia (según nosotros :v). No todos esperaban que así acabaría el mun...