XXXI

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Narra Bonnie

Bon y yo caminábamos hacia el centro de la ciudad, supongo que este es el camino hacia la reserva. Algunas personas se acercaban a saludarnos, aquí son muy amables. Una vez que llegamos al centro, me sorprendí mucho; había una gigantesca cúpula de cristal, rodeada por hermosos arbustos.

–¿Qué estamos esperando? ¡Vamos!– tomé la mano de Bon, y corrí dentro de la reserva. Ya quiero ver qué hay dentro.

Narrador Omnisciente

Ambos chicos se adentraron en el inmenso lugar. Una vez dentro, el más bajo se llenó de emoción al ver los alrededores; parecía una especie de bosque tropical, pequeños estanques y plantas que nunca había visto estaban por doquier. Sencillamente, era como estar en un paraíso natural.

–¡Todo esto es hermoso!– chilló el peli-morado con gran emoción. Siempre le había fascinado todo lo que tenía relación con el medio ambiente; tanto flora como fauna.

–En este lugar podrás encontrar todas las especies de plantas que existen en el mundo vampiro– aclaró el más alto.

–¡Vamos, quiero ver todo!– tomó nuevamente la mano de su novio, para comenzar a recorrer el lugar; parecía un niño pequeño recorriendo la dulcería más grande del mundo.
Sin haber caminado mucho, una flor curiosa llamó la atención de Bonnie. Era como un gran tulipán, pero de tonos morados y manchas celestes por doquier; expedia un olor amargo.

–¿Qué es?– preguntó curioso el de mirada rubí.

–Ese es un 'Delirio de la cruz', es utilizada para realizar distintos tipos de cremas hidratantes. Sus petalos tienen proteínas que son muy buenas para la piel, en especial para los vampiros– explicó.

–¿Y esta?– a unos metros, había una flor muy diferente. Una especie de margarita, pero negra con delgadas líneas amarillas en sus pétalos.

–Esa, es el 'Canto del eclipse'. No te acerques mucho– advirtió el peli-celeste, haciendo que su acompañante retrocediera junto a él.

–¿Eh? ¿Por qué?

–Su polen es altamente peligroso para los humanos. Si inhalas una de sus toxinas, podrías enfermar gravemente; y eso es lo último que quiero– habló preocupado.

–Aw, tú siempre quieres protegerme– con una sonrisa, plantó un dulce beso en la mejilla del oji-verde, provocando un dulce sonrojo en él.

Continuaron caminando por la enorme reserva, a cada planta que Bonnie veía le pedía a Bon que le explicara en qué consiste o su mayor importancia; el peli-celeste le explicaba todo con una sonrisa, al ver el entusiasmo del peli-morado por conocer más sobre su mundo. Todo iba bien hasta que se encontraron con una flor en especial; una especie de girasol, con los petalos bañados en un color azul marino, con algunas manchas plateadas, y su centro de un tono blanco, con salpicaduras de un color turquesa intenso.

–Bon... Esta flor es muy bonita, ¿Cómo se llama?– preguntó el más bajo con gran curiosidad, mientras abrazaba el brazo de su novio.

–Esa... Es la flor 'Lágrima de luna'– soltó en un suspiro– es la flor reina, la más bella de todas. Su nectar es el más dulce de todos, pero también puede resultar como un infierno; todo depende de la madures de la flor. Los grandes reposteros utilizan su nectar como ingrediente secreto para darle un sabor único, y sus pétalos para darle una apariencia extraordinaria.

–Wow, es una flor impresionante...

–Si... Eso creo– suspiro. El tan solo recordar el nombre de tan magnífica flor, le hacía recordar aquella noche. Sacudió su cabeza para alejar esos absurdos pensamientos– oye, hay algo muy especial que quiero mostrarte. Sierra los ojos, ¿Si?

Mitad Vampiro {TERMINADA} #FNAFHSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora