Mitad Vampiro {TERMINADA} #FNAFHS

XXXVIII

Maratón
Final De Temporada
7/11

En el almuerzo...

Narra Bon

-Bon~ quiero comer tacos~- Bonnie me miraba suplicante, yo solo suspiré.

-Bonnie, sabes que hoy no hay tacos. Hoy es Lunes, los tacos son los jueves- hablé de la forma más tranquila posible, cosa que me fué muy difícil. Mi paciencia tiene un límite ¿Saben?

-Pero yo quiero tacos, Bon ¡Quiero tacos!- mi miró furioso, acción que yo imite.

-¡No hay tacos, Bonnie! ¡Entiende que no puedes pedir cosas así nomás y creer que las obtendrás!

-Pero...

-¡Sin peros! Entiendo que esto sea difícil, pero hace poco menos de dos días me enteré y ya quiero arrancarme la cabeza, ¡Dame un respiro, por Dios!- pude ver que unos estudiantes nos miraban, unos furiosos y otros preocupados. En cuanto volví a ver a Bonnie, noté que unas lágrimas se formaban en sus ojos. Mierda, creo que me pasé- ¡Perdón! ¡Perdón! ¡No quise gritarte, conejito!

-T-tú tienes r-razón... Solo s-soy una c-carga- sollozó ¿¡Por qué soy tan estúpido!?

-No, no, no, no, no, tu no eres una carga, estás en todo tu derecho de ser algo caprichoso, yo soy el que debe cambiar. Debo ser más paciente, tú eres el que está esperando un bebé, no yo. Lamento haberte hecho sentir mal, conejito. Soy un estúpido- lo abracé dulcemente. Debo ser más calmado y comenzar a tomar la postura de un padre, por Bonnie y por mi hijo... O hija- veré como conseguirte unos tacos. Espérame aquí ¿Ok?

-Está bien- me sonrió. Amo ver esa dulce e inocente sonrisa plasmada en su rostro, me hace enamorarme cada vez más de él, aunque creo que eso es imposible. Deposité suavemente un beso en su frente y me fuí a buscar a Eak. ¿Porque Eak? Pués porque él simpre tiene tacos escondidos por ahí. De ahora en adelante cumpliré todos los caprichos de mi conejito sin reproches, no quiero que vuelva a llorar por mi culpa.

Narra Bonnie

Lo que Bon me dijo me hizo pensar... ¿Estoy siendo demasiado caprichoso? Tal vez me estoy dejando llevar un poco cuando me enojo, y me estoy pasando con pedirle todo el rato que cumpla con mis antojos... Estoy yendo demasiado lejos, debo de dejar de ser tan... Toddy, o Chloé, de mi programa favorito. Ag, me dió un mal sabor de boca con solo pensarlo, pero... Si me estoy pareciendo a ellas... ¡Santa madre del cataclismo! ¡Estoy torturando a Bon de una manera realmente horrible! ¿¡Qué clase de novio soy!?

Sentí una mano posarse en mi hombro, al voltearme, me llevé un gran susto. Chica me esta mirando muy... Furiosa.

-¡Aquí estás! ¡Te hemos estado buscando por todos lados! ¡Debemos hablar seriamente contigo, Bonnie!- noté que los demás estaban detrás de ella, incluyendo a las amigas de Bon. Pero mi mirada se posó en Golden, el cual me miraba... ¿Nervioso? Estaba sudando mucho y su sonrisa era forzada. Oh no... A como este idiota haya abierto la boca juro que dejo a Fred y Freddy viudos. Ni siquiera están casados con él ¡Pero igual!

Nota: Si, Los Animatronicos saben sobre Fred. Ahora, continúen~

-¿Sobre qué?- intenté aparentar que no sabía nada. Ella sono tomó a Golden del brazo y lo atrajo hasta ella.

-H-hola B-bonnie- me sonrió. Yo lo fulminé con la mirada.

-Te digo que tener a Golden como confidente no fué buena idea- Meg me miraba con una sonrisa burlona.

-Ya lo sabemos, Bonnie- Freddy me miró con una sonrisa.

-¿¡Cuándo planeabas decirme que seré tía!?- Chica señaló a Golden- ¿¡Sabes lo difícil que fué sacarle información!?

-Veo que no lo suficiente...- me levanté de mi asiento, realmente furioso. Este cabrón ya valió.

Narra Golden

En cuanto Bonnie se levantó supe que sería mi fin. Pude ver que un aura oscura lo rodeaba, y al mirarme a los ojos, pude ver unas pequeñas calaveras reflejadas. Fuera mi imaginación o no, estoy muerto de igual manera. Justo en ese instante, llegó Bon. ¿Esto es bueno o malo para mí?

-Bonnie, traje los ta... ¿Qué está pasando aquí?- él miró confundido a todos. Pudimos escuchar como Joy dió un pequeño chillido.

-¡Debo decirle a Abby sobre esto! ¡La OTP tendrá un bebé!- gritó emocionada mientras sacaba su móvil. Solo quiero decir que... Les dejo toda mi fortuna a mis ositos, porque de esta no salgo vivo.

-¿Acaso abriste la boca?- Bon dejó los tacos que trajo en una mesa y me miró con una sonrisa psicópata.

-Creo que el rubio oxigenado debe aprender a guardar mejor los secretos, ¿No piensas igual, corazón?- Bon y Bonnie intercambiaron miradas, yo tragué en seco.

-Claro que sí, conejito. Debe aprender que todo en la vida tiene sus consecuencias, y debemos aceptarlas- escuché como tronó sus nudillos, mientras Bonnie me miraba juguetón. Los demás simplemente retrocedieron un poco. Oficialmente, estoy muerto.

[...]