Capítulo 37. "Duerme" Segunda Parte.

539 19 10
                                    


-¿Y bien?- le pregunte a mi amigo cuando entre a su auto

-¿Qué?- dijo con una sonrisita inocente

-Oh vamos, esa sonrisa me lo dice todo.

-No es nada... Lo estamos tomando con tranquilidad.- se encogió en hombros, relajado, pero su sonrisa y ojos no decían lo mismo

-Te diré algo, pero no quiero que lo temes mal...- susurré con cuidado

-Es por Beth, ¿Cierto?

-Si...- susurré avergonzada

Aid suspiro antes de contestar.

-No lo sé, Jane es increíble y me gusta...

-Pero no es Beth.- termine su oración, él simplemente cerro sus ojos

-No quiero hacerle daño a Jane...

-Y yo no permitiere que se lo hagas, como muy bien dijiste, es una increíble chica. Pero antes de empezar algo con ella debes terminar con lo de Beth. Por el bien de ambos.- le dije serena

-Tienes razón.

En cuanto llegamos decidí ir a la peluquería, mis raíces castañas ya eran bastante notorias, así que Blue me acompañó.

Después de oscurecer mis raíces y cortar un poco las puntas, lo cual también hizo Blue, caminamos de regreso.

-Lia... Me iré unos días con mi familia.- dijo de repente

-¿Qué? ¿Por qué? ¿Es por Chris?- pregunte apresurada

-No, no es nada de eso. Sólo que mi familia esta en la cuidad y hace unos meses no lo veo...- murmuro con una pequeña sonrisa de tristeza

-Oh... En ese caso, te apoyo.

-Igual no te librarás de mí, yo vendré a visitarte siempre.- me aseguro abrazandome

-Eso esperó... Y lo siento.

-¿Por qué?- me miro confundida

-No he pasado el tiempo suficiente con ustedes...- susurré avergonzada

-Descuida, tu trabajo en el hospital termina en unas semanas, luego podremos irnos al lugar que queramos, ¿Qué te parece?

-Me encantaría.- le sonreí

Luego de cenar Blue comenzó a hacer su valija, mientras hablaba con Beth. Thomas se había ido a dormir temprano y Aid fue a la casa de Chris.

Mientras tanto yo, sentada en la cama, recordé las palabras de mi amiga.

"Ya falta poco para que Jane retome su puesto en el hospital..."

Pensé en todos los niños y lo bien que me había hecho conocer a todos, pero con la niña que más tuve cercanía fue con la dulce Emily.

"Y con su hermano..."

Llego a mi mente su rostro golpeado y la pregunta de porqué él actuaba así.

-¡Lia, ¿Quieres helado?!- gritaron mis amigas interrumpiendo mis pensamientos.

En cuento llego Aid, escondimos rápidamente el helado. Pero igual nos vio y se comió lo que había sobrado a mí.

-Malditas, no me querían convidar.- dijo ofendido

Todos nos fuimos a dormir y cuando todo por fin estuvo en silencio, mi mente volvió a trabajar. Uniendo la poca información que tenía.

-Él estaba conduciendo el auto en el cual murió su madre.

Recordé las palabras de Grace.

Lo Prometo. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora