Lo Prometo.

Capítulo 43. "Preguntas."

Lia.

-Debes comer...- me decía por décima vez Aiden.-No te lo volver a decir.

-Que bueno, ya me estaba cansando de decirte que no quiero.- murmuré parandome de la silla, me senté en el sofá y prendí el televisor.

Aiden recogió los platos y se sentó a mi lado.

-Emily ya salio del hospital, ya esta haciendo su vida con normalidad, no tienes que seguir castigandote por esto.

-No tendría que haber pasado por esto...- murmuré con enojo

Ya había pasado una semana del incidente por mi culpa. No volví a verla desde aquel día, ni a su padre ni hermano, tal vez por temor a encontrarlos no salia demasiado de casa.
Aiden me mantenía al tanto de su estado por medio de Jane, quien también se sentía culpable, pero ella no se había ocultado como toda una cobarde, sino que estaba mas pendiente de Emily y los demás niños.

-Bien, no hablaremos más del tema.- dijo y se levantó.- Ve a cambiarte.

-No tengo ánimos Aiden de...

-Deja de poner excusas.- me interrumpió con firmeza y se dirigió a su habitación.- En 10 minutos salimos.

-¿A dónde iremos?

-Lo sabrás cuando lleguemos allí.

Lo dude por un momento, no podía oculparme todo el tiempo, en algún momento lo iba a ver. Aunque deseaba que no fuese ese día. 

Me vestí lo mas rápido posible y me senté de nuevo en el sofá a esperarlo.

-Perfecto, vamos.- tomo sus llaves y salimos.

-¿Me dirás a dónde iremos?- pregunte ya en el auto

-Ya lo veras.- murmuró

-¿Es broma verdad?- lo mire irónica al ver que estábamos cerca del hospital

-Le tengo que dejar algo a Jane, no tardaremos.- me afirmo al llegar.

Él se bajo y yo vacilé en hacer lo mismo.

-Creo que a los niños les haría bien verte.- susurro mi amigo abriendo mi puerta.

Yo lo mire y él comenzó a caminar hacia dentro. Me tome mi tiempo en pensar si entrar o no, pero finamente decidí que sí.
Camine temerosa, eso era muy evidente. Recordé al simio correr hacia la puerta con Emily en brazos y luego desaparecer por el pasillo.
En cuanto entre me recibió Grace y hable unos minutos con ella, era agradable verla.
Algunos de los niños me vieron y se acercaron a saludarme.
Grace me comentó de las cosas que habían ocurrido desde que me fui, hasta que vi, por encima de su hombro, entrar a Emily junto a su padre y hermano.

Él estaba serio, al igual que su hermana. Su padre no se había percatado de mi presencia, pero el simio sí, él simplemente se quedó unos momentos observándome, sin cambiar su rostro neutro en ningún momento. Emily también logro verme, hizo una pequeña curva con sus labios, casi como una sonrisa de lastima, y siguió su camino.

"Eso fue doloroso."

Matthew.

A lo lejos vi a mi padre aparcar en el hospital. Mientras me acercaba en mi motocicleta pude ver un auto color azul que me resultaba familiar. Estacione justo cuando Emily salia del auto.

-¿Seguirás sin hablarme?- intente bromear

-Si.- contesto con firmeza tomando la mano de mi padre.

Ellos caminaron adelante y yo los seguí.

La situación con Emily se había tornado tensa, hacía cuatro días que casi no me hablaba, desde que le conté todo lo ocurrido con Lia.