Lo Prometo.

Capítulo 36. "Lindos momentos"

En el viaje a la casa de mi madre, yo no solté ninguna palabra. Todo mi cerebro trataba de procesar lo que había escuchado antes que Beth nos interrumpiera.

"¿Thomas había ido a visitar a sus amigos mientras nos decía que estaba cuidando a su tía? ¿Qué le dijo a Harry para que él se enojara?"

-¿Lia, estas bien? Has estado muy callada...- dijo Aid, cuando estábamos por llegar

-Si, sólo me duele un poco la cabeza, eso es todo.- le dije mirando por la ventanilla

Al cabo de diez minutos ya estamos todos en la piscina de mi madre. Todos habían traído su traje de baño, excepto yo.

-Jamás había notado esto...- le susurré a Lola mientras nos sentábamos en la orilla para meter nuestro pies al agua

-Es porque jamás te has tomado el tiempo para ver todo la casa, ¿Sabias que mamá tiene una habitación para nosotras?

-No...- susurré con vergüenza

-Descuida, yo tampoco lo había notado.

No acote nada más, me dedique a mirar a Thomas e intentar escuchar la conversación que tenia con Beth, los cuales estaban en la piscina a unos metros.

-¿Ocurre algo?- la voz de mi hermana hizo que reaccionara y note que Thomas me miraba

-No, anoche fuimos a una fiesta y aun tengo algo de sueño.

-Tus amigos parecen estar muy bien...- comentó antes de tomar su jugo de naranja.

-Si, bueno, yo me quede despierta mientras todos ya dormían.

-¿Y por qué?

-No tenia sueño.

Eso no era del todo mentira, cuando me fui con Matthew no tenia sueño.

-Iré a buscar algo para beber.- me levante antes que Lola siguiera haciendo preguntas.-¿Necesitas ayuda?- le pregunte a mi madre, viendo como ella cocinaba mientras escuchaba música

-No, cielo, ve a disfrutar del sol.

-De acuerdo.- me acerque a ella y bese su mejilla, fui a la nevera y tome una botella de agua

Al voltearme encontré a mi madre mirándome con una mueca.

-Ya sé lo que dirás.- susurré mirando mis piernas delgadas

-Entonces sabes lo que tienes que hacer.

Rodé los ojos y me dirigí a la puerta, pero choque con Thomas al intentar salir.

-Con permiso.- dije seca, intentado pasar

-¿Puedo hablar un minuto contigo?

Mire se reojo a mi madre y me dirigí hacia la sala.

-Bien, ¿Qué quieres?- pregunte crazandome de brazos

-Quería explicarte lo que escuchaste...

-No tienes nada que explicarme. Creo que Beth la merece mas que yo. A mi no me importa lo que hiciste con tus amigos, pero debo admitir que me da curiosidad porqué le mentiste a mi amiga, mientras ella se quedo preocupada y por largas horas esperándote.- dije con reproche

-Mi intención no era mentirle a Beth, dije la verdad sobre ir a visitar a mi tía.- dijo despacio, a lo cual yo alce mi ceja.- Pero en cuanto llegue a su casa, Josh me llamo. Hace mucho que veo a mis amigos y realmente quería verlos por lo menos unas horas.

-¿Y por qué no le dijiste eso a Beth?

-Beth no quiere que me hable con Harry...- murmuró avergonzado