Haru intentó hablar con Hoseok muchas veces mas él la ignoró. Me daba rabia toda la situación, pues nosotros no teníamos culpa alguna. ¿Acaso el gustarnos era cometer un crimen? Porque era así como él nos estaba haciendo sentir.
Él y yo íbamos a la misma clase, mientras que Haru estaba en la de al lado. Aún así aprovechaba cada descanso para asomar su cabecita por la puerta a ver si yo ya había conseguido solucionar algo.
Hoseok ni siquiera se quería sentar a mi lado. Todos a nuestro alrededor me preguntaban si habíamos peleado, estaban asombrados puesto a que era algo que no habían visto en años, o nunca, mejor dicho.
¿Qué les iba a decir? La verdad. Que él se estaba comportando como un crío y que no quería saber nada de nosotros. Aquel chisme corrió por todos lados. Se notaba que nuestro barrio era pequeño y que todo el mundo se conocía a la perfección.
Quizás era porque no comprendía qué teníamos de culpa, porque no sabía qué tan grande era el motivo de su enojo, pero a mi no me afectaba tanto como a Haru, la cual estaba bastante deprimida y preocupada por los tres. Cada vez que veía que él rechazaba hablar con ella me daban ganas de romperle la cara, ¿es que no se daba cuenta de que le estaba haciendo daño?
Por la tarde, a la salida, ni siquiera tuvo tiempo de pedirle hablar, él había salido huyendo como un rayo, jamás lo había visto tan veloz. Me tragaba los insultos, tenía muchos, pero lo último que quería era deprimir más a Haru.
Se estaba sintiendo como si todo aquello hubiera sido su culpa, como si hubiera matado a alguien. Cada vez que Hosoek le trataba mal podía ver sus ganas de llorar, lo retenía muy bien. Pero yo era capaz de verlo, cualquiera hubiera sido capaz de hacerlo, ¿es que a él le daba igual? Quizás estaba ciego.
Andamos en silencio todo el camino hacia su casa. Ella iba con la cabeza agachada, yo quería iniciar alguna conversación, o explicarle algún chiste para hacerle sonreír. Pero no veía el momento adecuado.
—¿Quieres hacer una carrera? Quien llegue primero a nuestra calle paga el desayuno de mañana—dije sin obtener respuesta de su parte—¿No? Bueno...—me rasqué la nuca frustrado.
Nunca había sido bueno en éstas cosas, ¿como se hace para que una chica sonría y deje de estar triste? Jamás había pasado por algo así. Era agotador.
Los padres de Haru me habían dejado quedarme a dormir en su casa, a ellos no les importaba que yo durmiera en la misma habitación que ella, en la misma cama. Al fin y al cabo habíamos crecido juntos.
Ella no me miraba, no levantaba la cabeza. Minutos antes de entrar a su casa se puso a gritarme que la dejara en paz, que no quería verme. Decía que ella había querido alejarme desde un principio, pero que yo era tan testarudo que no le hice caso. Ahora las cosas estaban así. Hoseok no iba a volver a hablarnos nunca. Los dos vimos en su mirada cómo se sentía. Como si le hubieran clavado un puñal por la espalda, como si le hubieran traicionado.
Todas las palabras que ella me había soltado eran malas, horribles. Me dolían pero sabía que sólo lo decía porque estaba asustada. Asustada de perder a Hoseok. Yo también lo estaba.
Pero me había estado callando lo que sentía por ella desde que tenía razón de ser, no iba a dar un paso en falso, no me iba a retirar.
Haru se dejó caer en el colchón agotada. Pequeñas lágrimas caían por sus mejillas y yo no sabía que hacer.
Me había pedido que la dejara en paz, pero yo le había estado siguiendo por toda la casa. No quería apartarme de su lado. Cansada de luchar contra mi, decidió ignorarme el resto de la noche.
Sus padres nos miraron como si supieran que algo raro había pasado. Era como si todo el mundo supiera de un momento a otro que yo había clavado un puñal por la espalda a mi mejor amigo.
La cena fue de lo mas incomodo. Ella jugaba con la comida, era raro no ver sus manos moviéndose rápido metiéndose todo a la boca, nadie comía mejor que ella. Además de eso, todo estaba en silencio. Lo odiaba, toda la situación en cierta forma me parecía absurda.
Me tumbé a su lado y posé una mano en su suave mejilla. Con mi pulgar sequé las lágrimas que caían. No sabía como sentirme, simplemente no quería verla así.
Levantó su mirada encontrándose con la mía. Pude ver arrepentimiento en sus ojos.
—Vete Tae...—pidió.
Negué con la cabeza una y otra vez. Me mordí el labio pensando bien las palabras para convencerla.
—Me necesitas aquí, contigo—le expliqué.
Haru sollozó escondiendo su cara en mi pecho mientras me abrazaba. Apretó en un puño la tela de mi camisa, la cual yo sentía mojada por sus lágrimas.
Aquel gesto fue como si ella me hubiera dado la razón. En el fondo ella también sabía que me necesitaba con ella.
Nunca la había visto tan vulnerable al tacto de alguien. Cada vez que movía mi mano para acariciar su espalda, la sentía temblar.
Escuché sus sollozos toda la noche, decía que la había cagado, que todo era su culpa y mi testarudez. Que ella no quería perder a Hoseok y que sabía como él se estaba sintiendo.
Quizás en aquel momento no me di cuenta de lo grave que era el asunto. Pensé que no era tan fuerte, no tuve en cuenta los sentimientos de los demás. Pero incluso hoy me pregunto; ¿es que no merezco ser egoísta ni siquiera una vez en mi vida?
¿Qué habíamos perdido? Todo.
¿Debí dejar mi orgullo de lado e ir a arreglar las cosas con Hoseok? ¿Debí ir yo a explicarle las cosas? Quizás si lo hubiera hecho a tiempo, no habría perdido a mi mejor amigo. Quizás si hubiera hecho las cosas bien, hoy, todo estaría igual. Los tres seguiríamos juntos. Nada nos hubiera separado, ni siquiera el destino.
🍃🍃🍃 Gracias menstruación por permitirme ser tan depresiva estos días y poder escribir.
Aish, este fic es de mis favoritos, es decir, me ha gustado muchísimo escribirlo pero ya le quedan pocos capítulos.
Adiós Hoseok ;-; -me voy a llorar-
Siento haber tardado en actualizar, he estado ocupada con la vida jeje :v
Les agradezco un montón todo el apoyo que me dan. Por favor, voten y comenten qué les ha parecido🙆💖
Sigan apoyando la historia, queda muy poco ;-;
Gracias, sois las mejores❤️
PD: VAYAN AHORA MISMITO A MIRAR EL COMEBACK DE ZIONT, DE DAY6 Y SOBRETODO EL DE BLOCKB o váyanse al infierno😈 okno.
Para despedir a Hoseok, un poco de mi segundo ship favorito: VHOPE.
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