¡Que comiencen los juegos!

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Bella POV

Me sentía bastante orgullosa de haber engañado a Edward para sacarle información sobre sus planes. Alice y Rosalie estaban empeñadas en asesorarme en lo que consideraba, de buena forma. Si iba a vivir con los Cullen eternamente, debía tener pleno conocimiento de trucos y artimañas. Y estas dos mujeres, eran expertas. Por enseñarme tantas cosas...

Alice y Rosalie estaban muy cerca la una de la otra, hablando a velocidad vampírica, y luego se voltearon hacia mí con una sonrisa en sus rostros.

-Subamos a la habitación, Bella. Tenemos un pequeño cambio en los planes y debemos reforzar los detalles.- antes de darme cuenta, Alice me estaba tirando del brazo, hacia el elevador.

Cuando llegamos a la suite, había una mesa con comida y bebida, obviamente para mí. Alice me sirvió un vaso y me lo alcanzó.

-No queremos que el Vodka te adormezca, así que tenemos que llenarte de azúcar y cafeína.

-Alice ¿Que está sucediendo con los chicos? ¿Que viste? Vienen a Las Vegas ¿No? ¿Edward sabe dónde estamos? ¿Qué es lo que haremos?- Alice sonrió sospechosamente ante mi erupción de preguntas.

Repentinamente podía presentir que nos encontrábamos ante el juego del gato y el ratón, entre nosotras y los chicos. Creo que Alice quería asegurarse de que estaba dispuesta para el desafío.

-Un segundo Bella, tengo que hacer una importante llamada.- Y tomó su teléfono. -Anthony, soy Alice. Necesito tu ayuda. Ha surgido un cambio en los planes. Tenemos que ir a la función más temprana. ¿Puedes hacer los arreglos por mí? Lo quiero todo de la misma manera, solo que una función antes ¿Está bien? Sí, creo que más tarde nos toparemos con unos amigos que llegaron inesperadamente a la ciudad. Si, enviar las cajas ahora mismo sería perfecto. ¡Ciao Anthony!- Alice apagó el teléfono y se volvió hacia mí.

-Bella, los chicos vienen a Las Vegas. Rosalie y yo no intentábamos ocultártelo, solo queremos que disfrutes del resto del fin de semana y no quiero que te pongas nerviosa por nuestros adorados esposos o prometidos, en tu caso. Te prometo que los chicos no arruinarán nuestra diversión. Pero por ahora, solo te daremos la información necesaria y básica. Siempre estaremos un paso adelante de ellos, lo cual debes saber que siempre han sabido eso. Y lo siento, pero son hombres y suelen ser bastante densos. Además figúrate, un mar de testosteronas sobre un Mustang, ahora mismo están creyendo que nos han ganado esta jugada. Tienen una lección que aprender. Debes saber que has hecho un muy buen trabajo con Edward. Vienen a Las Vegas y Emmett esta eligiendo un hotel, que de una sabemos que será...- Rodó sus ojos a Rosalie.

-La Isla del Tesoro.- dijeron al unísono.

-Los hombres y ese maldito fetiche sobre los piratas...algo no anda bien con él.- murmuró Rosalie para sí misma.

-Como sea, la operación aplasta hombres comienza ahora...- Tranquilamente tomó el teléfono y marcó un número. Puso el altavoz así podríamos oír, pero alzó su dedo índice a su boca, pidiendo que nos mantuviéramos en silencio. Esto se iba a poner bueno, lo sabía. Como los partidos de ajedrez en la casa de los Cullen; unas batallas épicas. Estaba emocionada de poder ser parte de esto, y habiendo pasado tanto tiempo con ellos, sabia de ante mano cual sería el bando ganador. Me senté silenciosamente y escuché.

-Hola Alice.

-Hola Eddie- Alice enfatizó el sobrenombre con una suave vocecilla

-Muy graciosa. ¿Se divierten corrompiendo a mi prometida?-

-Sabes que está perfectamente bien, Edward. Quién diría que unos jugos de arándonos y un poco de Vodka harían que Bella hiciera cualquier cosa que le pidiese. En tal caso, deberías agradecerme por haberle descubierto esa debilidad. Considéralo como un regalo de bodas adelantado de nuestra parte- Alice me echó un guiño

Vampiros en las vegasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora