En la vispera de los fracasos,
los niveles más bajos de pensamientos se vuelven nulos,
el cielo se descompone en obras banales,
la historia de mis besos hacia ti se desprenden de mis labios en un solo suspiro,
me ahogo en mis ganas de poder tocar tu delicado rostro,
me exacerba callar,
veo en tus ojos lágrimas cristalinas deseosas de no caer,
un ángel posa sobre tu espalda diciéndote que todo va a estar bien mientras toma tus lágrimas en una copa de oro,
tengo ganas de abrazarte y no soltarte pero desaparezco en el intento,
aquel olor de los florecientes limonarios me estorba en la nariz mezclándose con el olor de las rosas rojas,
pero.., ¿Qué más da?
El café se pondrá frio,
el verano no será igual,
ni el invierno, ni las noches ni los dias,
pero dado a que el sol saldra al siguiente dia,
"¿Me seguiras amando en la mañana?"
