Mi chico perfecto (Carl Grimes & Tu) [EDITANDO]

Cap.39

En realidad no tenía hambre, sólo lo decía para disimular.
Me asomé por la ventana, precisamente para ver si ya no estaba Carl o alguien por aquí, pues de alguna forma quería hablar con alguien, en este caso con Enid.

Sin más, salí corriendo de mi casa a la casa de Ryan, en la cual estaba Enid.

Estaba cerca de una árbol cuando ví a Carl salir de su casa a la casa de Olivia, supongo que fue por su vendaje.

Esperé a que él pasará y de prisa salí corriendo lo más rápido posible a casa de Enid. Finalmente cuando llegué comencé a tocar la puerta varias veces, hasta que por fin me abrió Ryan.

Ryan: _____, ¿Qué pasa?

Tú: ¡Hola! ¿Está Enid aquí?

Ryan: Si, pasa.

Entré a su casa, era muy linda, la estructura era la misma, pero el decorado era muy Ryan, colores oscuros pero con un porte cool. Él de inmediato le habló a Enid, quien bajó de prisa.

Enid: ¡_____! Ay, me hubieras avisado que venías —comenzó a reír, pues estaba en pijama ya —¿Qué pasó?

Tú: ¡Necesito contarte algo!

Enid: Soy toda oídos.

Tú: Pero en mi casa, es urgencia femenina —dije volteando a ver a Ryan y quizá sería incómodo. Él sólo alzó sus manos y comenzó a reír, dirigiéndose a su cuarto.

Enid: Bien, deja voy por un suéter —asentí desesperada.

Narra Carl:

Después de esa plática tan extraña con _____, me dí cuenta que estaba nerviosa, pues ella trataba de esconder sus manos, pero fue muy obvia, las vi, de hecho estaban temblando, pero... ¿Por qué? ¿Hice algo mal?

Me fuí de su casa con tantas dudas, quería regresar y preguntarle sobre lo que tenía, pero no, por algo quiso que me fuera, y no la culpo, tal vez yo hice algo mal.
Después de un rato, Michonne me mandó por una venda, ya que en mi casa se habían acabado, entonces me dirigí a casa de Olivia, sin embargo no me abría, supongo que no está, me di la vuelta para regresar a casa, pero me detuvo un ruido de fondo, eso me hizo voltear de inmediato, logrando ver a ______ en casa de ¿Ryan?, él le abrió y ella entró a su casa.

Estaba dirigiéndome a casa de Ryan, a punto de ver qué estaba pasando, yo me sentía nervioso y algo enfadado de eso, no quería que _____ estuviera con él, él sigue siendo una inseguridad en mí, porque muy en el fondo tal vez conoce más a _____ que yo.
Pero de pronto escuché que volvieron abrir, decidí correr a esconderme en un arbusto grande, y cuando me asomé note que salió _____ con Enid, se dirigían a su casa.

Eso me tranquilizó demasiado, menos mal ______ sólo fue por Enid. Incluso alcance a escuchar que _____ gritó "¡Odio a Ryan!" y comenzaron a reír, eso me hizo sentir muy aliviado.

Narras tú:

Salí con Enid, e íbamos directo a mi casa, todo bien hasta ahí, pues alcancé a notar que Carl estaba escondido en un arbusto, ¿me cree estúpida para no darme cuenta que nos vió?, a parte, su sombrero se veía mucho.

Yo sé que tal vez me vió entrar y supongo que él iba a irme a reclamar, precisamente porque vió que Ryan abrió y me invitó a pasar, pero fue por Enid, entonces decidí dejar algo claro y grité "¡Odio a Ryan!", y comenzamos a reír.

Enid: ¿De verdad? —preguntó entre risas.

Tú: ¡Shhh! Está Carl en un arbusto y sé que vió cuando Ryan me abrió, ¡Sígueme la corriente!

Enid: Qué bueno que lo odias, ¡él es mío! —gritó en respuesta.

Empezamos a reír discretamente hasta que llegamos a mi casa.

Enid: Ahora sí, ¡Cuéntame todo!, ¿sobre qué es?

Tú: Pues... —suspiré apenada —Es que vino Carl hace un rato, pero no sé, me sentí muy nerviosa, no entiendo por qué.

Enid: Mmm, ¿haz tenido relaciones con él?

Tú: Sí, ayer, fue mi primera vez. —debí empezar con eso. Ella abrió los ojos como platos.

Enid: Debes contarme después a detalle todo. —pidió sonriendo —¿Te tocó más de lo que antes hacía?

Tú: Sí, y me encantó, pero no sé, tal vez en el fondo me sentí incomoda porque me tocó en mi intimidad, es el primero que lo hace, y eso fue al principio pero no lo detuve.

Enid: ¿Incómoda? —parece que sólo escuchó eso. Yo reí leve.

Tú: Así es, me tocó ahí... —dije tapandome la cara, sentía pena.

Enid: ¿Entonces te masturbó? —solté una risita, lo decía como si nada.

Tú: Exactamente.

Enid: Seguramente te sentiste así porque le permitiste algo que a nadie más le habías permitido, digo, finalmente dieron ese paso importante y tú te entregaste a él —tomó mis manos para que destapara mi cara —_____, es normal que estés nerviosa, ahora más cada que recuerdas lo que pasó. —me sonrió tranquila. Enid me daba seguridad.

Tú: ¿Entonces no me sentiré normal cuando esté con él? ¿Así será siempre?

Enid: No, nada que ver, es sólo al principio. —aseguró —Si tienes confianza en él poco a poco te irás soltando más, sólo deja fluir todo.

Tú: Sí, si confío en él, pero tendré que controlarme. —comenzamos a reír después de eso —Gracias por escucharme y aconsejarme.

Enid: Eso me decían antes —dijo riendo.

Tú: Les debieron haber servido muy bien tus consejos.

Enid: A veces. —empezamos a reír —Bueno, ya me tengo que ir, ahora calma tus nervios y déjate sentir. —asentí regañada —¡Linda noche!

Tú: ¿Linda noche? ¡No tengo colchón!

Enid: Tampoco yo y no me quejo. —reí sarcástica.

Finalmente Enid se fue y yo cerré con llave mi casa, me detuve en el sillón analizándolo, no es tan incómodo así que tendré que hacerme a la idea de que esta ahora será mi cama. Me recosté y tape con unas cobijas, hasta que me quedé completamente dormida.