Mi chico perfecto (Carl Grimes & Tu) [EDITANDO]

Cap.79

Cuando llegamos, nos dirigimos a una celda para dejar ahí a Dwight.

Después de un rato escuchamos que llegaron autos, Rosita fue a ver quién era, mientras, yo me brinque el muro de Alexandria para salir a ver si no había algo interesante, no sé qué hacia, simplemente me daba curiosidad; Sentía como si hubiera algo o alguien ahí.

Tarde como 30 min. en estar buscando y ¡Nada! No había nada, talvez sólo esté cansada.

Me dirigí a la entrada de Alexandria, estaba caminando en una calle cerca de mi casa cuando vi al grupo caminando juntos y hablando sobre algo de Dwight, pero no vi a Carl ahí.

Como el grupo no sabía lo que hice de ir según a ayudar a matar a Negan, pues me saludaron como si nada.

Ya era de noche, caminé directo a mi casa, cuando llegué estaba un poco lejos de la entrada hasta que vi que abrieron la puerta de mi casa, vi bien y era Carl saliendo de ahi con mirada triste, cerró la casa con llave y al voltear se llevo la sorpresa de verme.

Me vió, sonrió y los dos corrimos a abrazarnos, estábamos tan juntos que no quería separarme de él.

Carl: Pensé que habías muerto, ¡Tantas cosas pasaron por mi cabeza!

Tu: Pues no, estoy viva, jamás te dejaría, Carl.

Él me sonrió al escuchar eso, y nos dimos un beso. Cuando nos separamos, me tomó de la mano y abrió la puerta, al entrar cerró.

Carl: Cuéntame, ¿qué pasó?

Tu: Lo mate...

Carl: ¿Qué?

Tu: Maté a Simon...

Carl: ¿¡DE VERDAD!?

Tu: Si, y fue bastante fácil...

Carl: Pero... ¡¿Cómo!?

Le conté todo lo que había pasado, hasta del conductor.

Carl: Que bueno que lo mataste, si se hubiera atrevido a hacerte algo malo, lo hubiera matado.

Tu: No, jamás me dejaría, no soy tan tonta.

Carl: Eso si, ¿Y qué hiciste con los cadáveres? No me digas que los dejaste ahí...

Tu: ¡No! Los metí en el camión y lo llevé a un lago, dejé el freno y cayó ahí, no hay rastros de ellos.

Carl: Muy bien, Simon tenia razón.

Tu: ¿Razón?

Carl: ¡Eres muy astuta!

Tu: Pues... ¡Gracias!

Los dos reimos y él sólo me veía a los ojos sin dejar de sonreír.

Tu: ¿Qué?

Carl: No, nada...

Tu: ¿Por qué me ves así?

Carl: Nada más... ¿No puedo?

Tu: ¡Claro que puedes!

Carl sólo rió y bajó la mirada, se paró del sillón y me estiró la mano, me levantó y me besó, fue tan lindo ese momento, ese beso, pero tuvimos que parar.

Carl: Bueno, te dejó, debes estar cansada así que será mejor que descanses.

Tu: Si, vengo muy cansada, mañana nos vemos.

Carl: Descansa, hermosa.

Tu: ¡Igual tú, guapo!

Salió de mi casa y cerro la puerta.

Siendo sincera estaba muerta del sueño, por lo que decidí subir a dormir.

Al siguiente día:

Me desperté, realmente era muy temprano.

Me aliste (bañe, peine, lavé mis dientes, me cambié, etc...) y preparé mi desayuno, en ese momento tocaron mi puerta y era Enid.

Abrí y ella paso algo nerviosa.

Enid: ¡_____!

Tu: ¡¿Qué pasa!? ¿¡Qué tienes!?

Enid: ¡Creo que estoy embarazada!

Y ahí me quedé perpetua... ¡¿QUÉ CARAJOS?!

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CHAN CHAN CHAAAANNNN...