Él sólo se giro velozmente golpeándome en el hombro y saliendo de ahí inmediatamente.
El sonrojo que no desaparecía de mi, hizo que se me cristalizaran un poco los ojos, sentí que iba a llorar, pues sentía un enorme hueco en mi interior.
Traté de tranquilizarme y salí de ahí limpiándome los ojos, me calme un poco y seguí con el juego.
Habíamos jugado tanto, que ya era hora de salir, regresando al salón por nuestras mochilas.
Mientras metíamos nuestros útiles para regresar a casa, hablamos de lo mucho que nos habíamos divertido, pensando en volver a jugar a algo parecido el día de mañana.
Llegamos a casa, comimos, e hicimos cosas comunes, lo normal, llegando por fin la noche, aunque dormí un poco inquieto por esperar a que ya fuera de mañana.
Al día siguiente, el orientador, nos pidio ayudar con el aseo del salón, por lo que básicamente estuvimos ocupados en eso toda la mañana.
Como no habíamos tenido tiempo para jugar, nos quedamos de ver fuera del jardín para jugar un rato, la mayoría no pudo quedarse con nosotros, quedando solo mis amigos y los felinos.
Pensábamos en qué jugar, dando algunas opiniones, pero cuando el puma hablo, la mayoría acepto sin escusa.
- Sí, sino se va a acabar el tiempo, y también tengo otras cosas que hacer - dijo la guacamaya, un poco exaltada.
No estaría mal, pensé, después de todo sólo patearíamos la botella, que tan difícil podría ser, aunque en realidad no sabía concretamente en que consistía ese juego.
Mis amigos me explicaron como se jugaba, me sorprendió un poco sus reglas, pero todos estaban decididos a jugarlo, así que sólo terminé por aceptar.
Cuando estábamos listos, giré a ver al puma que se acercaba hacía nosotros con una botella de vidrio, mientras el pelirrojo, le decía -¡Hey!, ¡Oye!, Te estoy hablando - ignorándolo por completo.
Pobre chico, al parecer sus amigos en ocaciones también lo ignoraban; sí fuera mi amigo, lo escucharía todo el tiempo sin ningún esfuerzo.
En el círculo que formamos, me senté junto a Darling, pero cuando se integraron los felinos, el leopardo se sento a mi derecha, y el puma al otro lado de mi, por tal motivo el pelirrojo se sentó a lado de la guacamaya, que mal, si me dieran a escoger, preferiría estar al lado del pelirrojo.
Para una mejor idealización diré el orden en el que estábamos, empezando por mi lado derecho: El Leopardo, Darling, el Duende, la Loba, Chase, la Guacamaya, el Oso, la chica Angelical, el Puma, regresando otra vez a mi.
Después de cada juego, las preguntas eran más incómodas y los retos subían de intensidad, pero cómo ya era algo tarde dijeron que serían los últimos tres retos, aunque con un cambio súbito en las reglas, las cuales consistirían en un beso.
Antes de girar la botella el puma, la estaba haciendo de emoción, poniéndonos a todos muy nerviosos, el oso lo persuadía a tirar, pero este se hacía del rogar.
Me estaba hartando un poco, y sin más dije - ¡Tira ya! -
Fue algo gracioso, porque todos lo dijimos al mismo tiempo, así que ya no me sentí tan avergonzado por mi precipitada reacción.
Por lo que el duende le quitó la susodicha, para girarla el mismo.
Cuando la botella dejo de girar, la parte inferior señalaba a mi amiga la loba y del otro lado al puma.
Todos, incluso yo empezamos a reír, tanto drama, y le había tocado a sí mismo, aunque para ésta, no fue para nada gracioso lo que estaba sucediendo.
Mi amiga la loba, se negaba a hacerlo...
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Amor sin Sentido 3 (ChicoxChico)
RomansaLa historia Ever After High se basa en los hijos de los famosos personajes de cuentos de hadas que asisten a la escuela del mismo nombre. Ellos están destinados a seguir los pasos de sus padres para mantener con vida a sus historias a través de las...