Casada A Los 16 [Chandler Riggs Y Tu]

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Narra ___:

-Mis bebés... Hola hermosas... Como han estado?

-Bien, sabes... Extrañándote..-Dijo Mia.

-Si, no sabes lo que extraño que me la pases regañandome...

La mire y reí.

-Como sea, que haces aquí?

-Pues de hecho, no lo sé...

-Claro que no! Por que no es el lugar correcto...

-Pero y en dónde se supone que este?

-En casa... Con papá y con Ian y Logan.

-O en la tierra con tu familia...

-Pero estoy aquí... Si paso es porque así tenía que ser...

-No, claro que no, se supone que tú tendrías que venir aquí dentro de muchos años, cuando ya hayas logrado tener muchos hijos más, con papá... - Se miraron - No?

-Eso creo... -Asenti.

-Pues hazlo... Cada minuto o segundo que pasas aquí corres peligro...

-Pero no me quiero alejar de ustedes...

-Tienes que hacerlo, es por tu bien, y por el bien de tu familia...

-Pero yo no... -Senti como si me estuvieran arrastrando hacia atrás...

Como si estuviera retrocediendo pero sin caminar hacia atrás...

-Quedate tranquila, hay una sorpresa esperándote del otro lado...

-Que?! Que es?!

-No te lo diremos...

-Por favor hijas...

Negaron.

-Saben que no me gustan las sorpresas...

-No, sabemos que eso no es sierto!- Grito Vaioleth

-Te amamos! -Gritaron fuerte.

Narra Kira:

Llevaba lentes de sol puestos, no quería que Ron o keasha me vieran llorando.

-Mama, sácate los lentes... Estamos adentro, en una sala de hospital, es de mala educación... -Dijo Ron.

-Es que la verdad, últimamente ando muy sencible con el tema de la claridad en los ojos y todo eso...

Me miró con cara de "en serio?!"

Keasha entro con Logan e Ian en la habitación.

-Bueno, recuerden que somos espías muy importantes, y que es muy importante que no hagamos ningún tipo de ruido, o nos pueden descubrir, si?

Ambos niños asintieron emocionados.

-Okey... -Tomo una silla y se unió a la pequeña ronda que formamos al lado de la camilla de ___.

-Pudiste ir a verlas?

Asintió.

-Y que tal están?

-Pues, el pediatra dice que está todo en orden...

-Puedo ir?

-Claro...

Me levanté de la silla.

Iba rumbo a salir de la habitación, pero ___ se despertó de pronto y grito -Yo las amo!

Me quedé petrificada mirándola.

Sus ojos se aguaron y supe que enseguida iba a llorar.

Corrí a su lado y la abrace, abrazo al que claramente gustosa respondió.