Son las 8 pm y esa es la hora acordada para iniciar nuestro viaje, llegaríamos a la montaña al día siguiente, porque queda a las afueras de la ciudad, Matt y Sarah pasaron por mí y luego iríamos por los demás, esta vez conducía mi amiga, Matt no podía manejar de noche.
Luego de buscar a todos emprendimos nuestro viaje, pasamos comprando comida rápida, alcohol, bebidas entre otras cosas que necesitaríamos, según los chicos el camino será largo.
Todos dormían mientras Sarah nos llevaba a la cabaña de Edd donde nos hospedaríamos, y yo miraba a la noche oscura mi amiga se le veía cansada según los cálculos sólo faltaba una hora para llegar.
–Luna, ¿te importaría manejar tú, estoy que me duermo?
–Lo que pasa es que no sé manejar-mentí, desde un día que choqué mi auto no había vuelto a conducir.
–Si quieres puedo enseñarte, siempre y cuando alumbres mi vida - dijo Matt moviéndose bajo de mí, porque de nuevo iba en sus piernas.
–¿Tú no estabas dormido?
–Tu lo has dicho lunita, estaba ya no, oye hermanita ¿ya estas cansada?
–No Matt sólo que quiero jugar a cambio de chófer - respondió mi amiga utilizando el sarcasmo.
–¡NOS QUEMAMOOOOOS,VAMOS A MORIR,DESPIERTEN!- Gritó Matt desesperado todos se despertaron asustados incluso yo me asusté.
–Eres un imbécil - dije sin pensar.
–Y tu una mala amiga-eso me dolió –, no había otra forma de despertarlos para que Cameron manejara y Sarah descanse.
–De igual forma eres un imbécil - respondí sonriendo.
El resto del viaje, lo hice dormida en el regazo de Matt, llegamos a la cabaña de Edd, pero compartiríamos habitaciones sólo habían 4 y eramos 7 personas, quedaron divididas así, en la primera habitación Edd y Keysi, en la siguiente Charlotte y Cameron, la próxima habitación era de Sarah sola no le gustaba dormir acompañada o seguramente es por algún trato con su hermano, y en la última habitación dormiría yo con Matt.
Todos nos fuimos a las habitaciones, debíamos continuar para ir más tarde a la montaña ya eran las 3 am.
–¿De que lado quieres dormir Luna?
–Del que sea Matt, da igual.
–¿No quieres dormir conmigo? - preguntó Matt haciendo un puchero que me causó gracia.
–¿Tengo otra opción?
–Está bien- y se acomodó en la cama dejando un lado para mí.
Caí en un sueño profundo, desde el día que mi vida cambió todo era constantes pesadillas, pero hoy al lado de Matt realmente pude descansar.
Sentí algo frío en mi cara, el estúpido de Matt me lanzó un vaso de agua para despertarme.
–Te odio- fingí un mal humor.
–Mentira, no sabes mentir, mentirosa-dijo Matt lanzándome una almohada.
–No me digas mentirosa- respondí lanzándole otra y fue así como iniciamos una guerra hasta que llamaron del otro lado de la puerta.
–Chicos, ¿ya están listos? - Esa era la voz de Keysi.
–No, Luna aún está dormida, la despierto y vamos a desayunar - le lancé una mirada asesina a Matt.
–Genial no se demoren - escuché una risa de Keysi.
–¿Piensas quedarte ahí parada todo el día?
–No imbécil, salte para que me pueda bañar.
Poco a poco Matt se fue acercando a mí y mis nervios no eran normales.
–Cuando te enojas te ves más bella- susurró en mi oído y se fue dando un portazo.
Luego de arreglarme y ponerme algo cómodo unos leggins, converse y una blusa, fui a donde estaban todos en la cocina de la cabaña.
Desayunamos, reímos y nos fuimos a nuestra excursión,ya habíamos caminado 1 kilómetros y las chicas se comenzaban a quejar incluyéndome.
–Ya no quiero seguir, estoy agotada - dije sin ánimos
–Tranquila Luna, faltan sólo 3 kilómetros más para llegar a la montaña - contestó Cameron riendo.
–¿QUÉ? - esta vez fue Charlotte quien habló.
–Eso es mentira, ya falta poco para que lleguemos - intervino Sarah
–Si pero yo estoy cansada.
–¿Si Luna se cansa quien los alumbra?- dijo el idiota de Matt mientras me señalaba su espalda para que subiera.
El resto del camino todos se dispersaron y Matt aún me llevaba en su espalda, llegamos a la cima pero aún los chicos no llegaban, desde aquí se veía toda la ciudad, era una vista hermosa, realmente hermosa.
–¿Te gusta lo que ves? - asentí con la cabeza.
–A mí me gustaría si te bajas de mi espalda.
¿Por qué no podía haber un momento en el que Matt no saliera con sus tonterías?
–Eres un idiota.
–Y tú eres hermosa.
Y nuevamente Matt se acercó a mí esta vez mucho más de lo que se acercó, podía sentir su aliento, y casi me besa pero llegaron los chicos interrumpiendo el momento¡gracias chicos!
Y desde ahí no tuve más acercamientos a Matt era de noche y estábamos cenando, los chicos propusieron ir a un bar pero yo no iría me quedaría y al parecer Matt se había enfermado del estómago y el también se quedaría en la cabaña.
Todos se fueron y Matt y yo quedamos solos, Matt tenía un gran bote de helado en sus manos.
–¿No estabas enfermo del estómago?
–Realmente no, solo fue una excusa para quedarme contigo viendo películas - sentí la misma corriente de aquel día a escuchar eso.
–Eres raro, muy raro.
–Lo raro atrae¿no? - dijo Matt con una sonrisa picara.
–Dame helado.
–Claro luna, tus deseos son ordenes- metió la cuchara en el bote de helado y me la pasó por la cara, esto era guerra.
–Estas muerto, Matt Adams - y así comenzamos una dulce guerra.
–No me importa morir si es por ti
...
El fin de semana se nos había acabado, el viaje a la montaña y los días en la cabaña fueron geniales me olvidé de mis problemas de mis tormentos por un rato, pero volvieron al encontrarme a una persona que no creía en la librería la tarde del lunes
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Maravillosa Luna
Teen FictionDe pronto a tus 18 años la vida da un giro de 180°, Luna jamás creyó que sería lo que es ahora. Dos años han pasado desde ese acontecimiento que marcó su vida, su esencia su ser. Ella nunca ha sido de las personas que se rinden a pesar de tener pr...