Hoy es el cumpleaños 18 de Ángel. Espero que el no intente suicidarse de una sobredosis de pastillas.
El día ha transcurrido normal, como cualquier otro. Incluso no parece recordar que hoy cumple 18. En el desayuno cuando llegó a la mesa, le dije que feliz cumpleaños y por un momento no hubo respuesta pero cuando se sentó dijo "Ah, sí. Gracias" Como si hubiera olvidado qué día era. El desayuno fue incómodo. Nadie hablaba con nadie y sólo se oía el tintineo de los platos con las cucharas. Mis papás se veían muy tensos. El silencio se rompió cuando Ángel tiró (sin querer) un vaso con jugo y éste se quebró en pedazos cuando llegó al suelo. Antes de que pudiera moverse para recogerlo, mi papá le dio una cachetada con una fuerza descomunal. Fue un sonido seco, nunca antes había visto algo así en mi vida.
Silencio.
Vaso.
Cachetada.
Silencio.
Mi mamá y yo veíamos a mi papá y luego Ángel, que tenía el cachete rojo y los ojos llenos de lágrimas. Mi papá, por otro lado, tenía los ojos casi a punto de desorbitarse, no se movía. De hecho nadie se movía. La escena duró como 20 segundos, pero pareció una eternidad.
Ángel se levantó y dijo:
- Quizá Matías hizo bien al querer matarse en su cumpleaños. Y que no les sorprenda que yo también lo haga.
Dicho esto se fue a su cuarto y azotó tan fuerte la puerta, que inclusive retumbó el piso.
Yo estaba en el comedor, viendo fijamente el plato con huevos revueltos a medio comer, mientras mi mamá empezaba a llorar y mi papá estaba igual que yo, viendo su plato. Luego se levantó y empezó a recoger el vaso.Es curioso como en poco más de un mes, mis hermanos han tenido incidentes tan estrambóticos y que nunca imaginé que fueran a suceder.
Espero que Matías regrese pronto.

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Diario Triste de un chico triste
Fiksi RemajaGael recibe un regalo bastante inusual en su catorceavo cumpleaños: un diario. Al principio le cuesta escribir en él, pero con el tiempo le toma cariño y relata su vida diaria con detalle durante cuatro largos, intempestuosos y maravillosos años. La...