*Narra Noa
La esperé durante el tiempo que me dijo estaría lejos, y aunque se atrasó tenía fé en que volvería, mi corazón me lo decía, si tan solo nos pudieramos comunicar todo sería más sencillo.
Pero al paso de seis meses despues me llegó una excelente pferta para dar una gira por toda Asia. Mi fama fue creciendo sin embargo no quise usar mi nombre real, me puse un nombre en honor a la chica que me enseñó a amar, aquella por la cual un tren era la mejor aventura.
Viajaba de un lugar a otro día tras día, hasta que estos se convirtieron en meses y los meses en seis largos años, en los que tenía la esperanza de verla, y cumplir nuestra promesa, pero mientras más corría el tiempo, más me daba porvencido, estaba convecido de que ella quizas ya se había casado y retirado.
Hasta que conocí a una chica americana pianista, aunque totalmente diferente a Sara, su nombre era Karla, tenía cabellos negros y rizados y una hermosa piel morena.
Todo comenzó como una relación de trabajo pero terminó en algo más, yo no lo llamaría amor, para mi era una relacion para calmar pasiones, por lógica ella si sentía amor y me daba miedo lástimarla así que seguí con ella como por un año, hasta que se me invitó a participar a un concurso internacional de violinistas, mi único objetivo desde que partí de Japon, no, desde que conocí a Sara, fue llegar a la cima y este era el último escalón debia ganar.
Karla y yo practicamos mucho para poder ganar y sin embargo nuestra conexión no donaba tan bien como lo hacia mi conexión con Sara.
Primero se presentaban aquellos sin acompañante y pude notar aquella hermosa figura en el escenario, tan bella como siempre, expresando amor y bondad, mi corazón sonrió de felicidad y algo en mí despertó.
Luego de presentarme la busqué pero me dijeron que ya se había ido, solo pensaba "debo encontrarla". Unos minutos antes de irme Karla se acercó a mí y me dijo:- ¿Quien es ella?, ¿Porque la buscas?
-Solo una amiga- dije tristemente ante la mentira, pero no podía decirle la verdad- ella y yo trabajamos juntos cuando recien comencé.
Era obvio que a Karla no le gustó esa respuesta y ahora luego de reencontrarme con Sara y besarla me dirijo a el apartamento de Karla para hablar con ella, esperando no hacerle mucho daño.
Al llegar, entro ya que tengo una llave, ella está en su habitacion, dormida, luce linda pero ella no es para mí, decido no despertarla así que voy al sofá y leo por un rato.
-¿Cuando llegaste?- escucho una voz proveniente de Karla quien se posó atras de mí.
-Hace algun rato- le dije mientras bajo mi cabeza y luego de unos segundos digo- debo hablar con tigo.
-Claro dime.
-No quiero ser cruel con tigo este año a tu lado a sido hermoso pero...-tomo un respiro antes de continuar- creo que tu y yo deberiamos quedar aquí ¿entiendes?, no eres tu es solo que...
-La amas- dijo Karla con los ojos llorosos y sin dejarme decir más- y no es algo reciente es algo que siempre ha estado alli ¿cierto?, no se quien sea ella para tí, pero ¡no te quiero volver a ver en mi vida! Por favor vete, se que la amas hace mucho y que solo fui un juguete.
Mis ojos la miraron fijamente pues habia acertado, aunque lo dijo de una manera que no quise aceptar durante mucho tiempo:- Gracias por todo- le dije dandole mis llaves y partiendo.
Estoy seguro deque ella se encerró en su habitación a llorar, pero no podía permitirle estar con alguien que no la ama, es mejor asi. Ella conocerá a alguien mejor, en cuanto a mí, quizas por fin logre estar con Sara.
Aunque ya la habia tocado queria retomar aquella sonata que ella tanto amaba, se que nuestros sonidos encajan a la perfeccion y nunca pudimos tocar aquella canción que ella tanto queria, para cumplir aquella promesa
ESTÁS LEYENDO
Las Vías de Tren
RomantizmEsta es la historia de Sara una gran pianista a la corta edad de 19 años que viaja por el mundo dando conciertos, hasta que llega a un pequeño pueblo y todo cambia para ella cuando conoce a Noa un violinista novato quien la admira. Poco a poco comie...