El misterio de Anne Gallahan

XV

- Asuntos pendientes:

- Acudí en busca de Arlene Pemberton con la finalidad de averiguar que estaba ocurriendo. Cuando la encontré, estaba sedente en los escalones que daban acceso a la comisaría, resguardada de la lluvia que no cesaba de caer.

● Elliot Britt: ¿Puedo ayudarte? - Dije mientras se exaltó al escucharme y se limpiaba las lágrimas de su rostro.

● Arlene Pemberton: Tranquilo, no hace falta preocuparse por nada.

● Elliot Britt: No es cierto, cuando vistes el boceto de aquella persona te quedaste en blanco.

Tras una breve pausa en la que únicamente se percibía el fuerte viento atravesando las calles, se decidió a aclarar lo sucedido.

● Arlene Pemberton: Lowell Hall, la persona a la que me describiste se llama Lawell Hall.

Me hallaba confuso a pesar de saber ya la identidad de aquella persona.

● Elliot Britt: Y, ¿qué tiene que ver él en toda esta investigación?

● Arlene Pemberton: Más de lo que podéis llegar a pensar. - Dijo con voz temblorosa.

Estaba dispuesto a seguir hablando de ello, pero fuimos interrumpidos por Scott Weaver.

● Scoot Weaver: Deberíais de venir y ver esto, es urgente.

Ambos nos incorporamos de los peldaños y los ascendimos hacia la comisaría, siguiendo el camino que marcaba Scott Weaver, que nos condujo hasta el despacho de William Becket. Entró y alcanzó un pequeño papel dispuesto sobre la mesa.

● Scott Weaver: Léelo. - Dijo refiriéndose a mi persona.

● Elliot Britt: "Debo de disculparme con cada uno de vosotros, pero era necesario irme sin que supieras sobre ello. He decidido resolver qué relación tiene esto con el asesinato de Anne Gallahan, y por eso mis pasos me han conducido hasta el hospital-psiquiátrico Bethlem ".

● Scott Weaver: ¿Qué significa todo esto? - Dijo mirando a Arlene Pemberton.

● Arlene Pemberton: Debería de haber confesado antes, y probablemente podría haberlo evitado. - Dijo con un rostro que reflejaba lamentación.

● Elliot Britt: Todo esto va unido a aquella persona que te describí y representaste en un boceto, ¿verdad?

Era consciente que la situación ante la que nos encontrábamos había que tomársela con cautela.

● Arlene Pemberton: Mi oficio como policía no comenzó aquí, si no en un lugar en el que los criminales abundan tras las paredes, donde estudiaba a qué se debían sus comportamientos; era psicóloga.

De inmediato me percaté de todo.

● Elliot Britt:¿Entonces, aquel hombre, Lowell Hall; lo reconociste porque le trataste durante el periodo que ejerciste aquel oficio?

● Arlene Pemberton: Pero no se trata únicamente de eso, el lugar al que se ha dirigido William Becket, es en el que traté a ese paciente.

Comenzaba a inquietarme esta situación, simplemete por hacerme la idea de que William Becket se dirigía de manera solitaria a un lugar tan frívolo.

● Scott Weaver: Deberíamos de marchar cuanto antes, desconocemos si William Becket se encuentra seguro allí.

Salimos de la comisaría y anduvimos hacia la estación de autobuses con la intención de hallar un conductor dispuesto a dirigirnos hacia aquel lugar. Al llegar, montamos en un taxi y le indicamos el destino; de camino atravesamos con cierta dificultad numerosas carreteras con abundantes curvas; y tras un largo periodo de tiempo, llegamos.