Habían pasado varios días y Eliot no despertaba, concluimos que tenía una especie de trance o algún hechizo, pero no estábamos seguros de eso. Lo teníamos vigilado siempre, sus signos vitales eran normales, su aura estaba bien, pero no había respuesta alguna.
Diariamente desaparecían personas...Por más que buscáramos, no era suficiente, no las encontrábamos, eso me afectaba mucho. Sentía que mis hermanos psíquicos estaban siendo eliminados uno por uno, me da mucha impotencia y coraje no poder hacer algo al respecto, estaba completamente frustrado.
Leonardo seguía con las visiones apocalípticas, cada vez empeoraban más. La única cosa buena era que siempre en esas visiones nos daban pistas acerca de ese psíquico celestial capaz de parar todo esto.
Sin embargo, en el mundo normal, todas estas cosas sobrenaturales no generaban consecuencia alguna. Las personas seguían con sus vidas normales, preocupadas con la situación política del país, que estaba en decadencia, no había suficiente comida, había un déficit farmacológico grande lo que agravaba la salud de las personas y los altos índices de delincuencia, todo era un desastre, todo estaba mal.
Leonardo, Lucy, Dereck y yo nos reunimos. Teníamos que discutir lo que estaba sucediendo.
- Muchachos como todos sabemos hay personas desapareciendo, y no tengo duda alguna de que sean psíquicos, los raishock los están cazando. Hay que hacer algo – dije con algo de seguridad, intentando parecer un líder.
- No sabemos nada sobre los desaparecidos, los hechizos de rastreo no sirven, no hay forma alguna de encontrarlos. Me temo que estén muertos. – Responde Leonardo con tristeza en su voz.
- Si, es la dura realidad. Esto se está saliendo de control, ¿Si algún día los Raishock vienen por nosotros? ¿Podríamos sobrevivir...? – dice Lucy dejando escapar unas lágrimas.
- Hay que tener fe y ser fuertes. Hemos vencido en dos ocasiones a esos demonios. Estoy seguro de que ellos no nos podrán vencer, es más les patearemos el trasero – Grite con furia, miedo, alegría, confianza, todo al mismo momento.
- Eso es cierto, con el paso del tiempo hemos desarrollado más nuestros poderes. Tenemos que seguir unidos, en la unión está la fuerza. – Agrega Dereck con tono heroico.
Por un momento todas las cosas horribles que pasaban desaparecieron. Algo divino inundo la sala donde estábamos reunidos. Los mismos seres celestiales que vi aquel fatídico día en mi estacionamiento se hicieron presentes. Nos tocaron a cada uno. Nuestras auras comenzaron a brillar, pero de pronto, algo oscuro se apoderó de esas almas de luz... Cuando eso pasó, los cuatro gritamos y de esa forma volvimos a la realidad.
- ¿Qué acaba de pasar – Pregunta Dereck temblando.
- No lo sé, pero chicos no fue real, fue una visión. Solo que estuvimos los cuatro presentes – Responde Leonardo.
- ¿Y siempre todas tus visiones son tan reales? Pude sentir el dolor de esas almas. – Pregunta Lucy.
- No, esta fue diferente, no tengo idea de lo que sea – dice Leonardo.
- Creo que esos seres de luz, son los psíquicos desaparecidos, intentan comunicarse con nosotros, están bajo un grave peligro – Dije llorando.
- Diego, es muy peligroso, hay que esperar, conocer mejor la situación, estudiarla. No hay que correr riesgos – Dice Leonardo. Se acerco a mí e intento calmarme.
- Leonardo tiene razón, primero hay que saber a que nos enfrentamos. – dice Dereck.
- Bueno muchachos, mejor vayamos a descansar, tengan cuidado – Dije, luego de unos minutos cada quien se retiro.
ESTÁS LEYENDO
El Aura Dorada
Paranormal¿Qué pasaría si estar a punto de morir te da nuevas habilidades? Una forma diferente de ver el mundo se abrirá ante tus ojos al saber que eres el elegido para cuidar el plano astral. Eso es lo que vive Diego, cuando todos sus miedos, todas l...