Capítulo 26: Shin

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Fui corriendo a donde estaba Budo-kun antes de que se fuera al club, una vez lo alcancé le toqué el hombro para llamar su atención.

— Hola Shin ¿No deberías estar dónde Oka-chan?
— Ella suele espiar en la terraza a las hermanas Basu.
— ¿Sigue con eso de qué son demonios?
— S-si, ya la conoces.— reí.
— Creo que deberías ir con ella y llevarla a pasar un buen rato.
— ¿Tu crees?— pregunté tímido, a lo que él asintió.— tienes razón, gracias Budo-kun, iré.
— Te veo luego entonces.

Fui a la terraza y la vi espiando a las hermanas como siempre y decidí ir a donde estaba. Le toqué el hombro con mi dedo dando pequeños golpes a lo que se giró a verme.

— ¿Shin-kun?
— H-hola...— dije un tanto nervioso, estaba arrepentido de mi coraje, pero sabía que ya no había vuelta atrás.
— ¿Pasa algo con el club? ¿necesitas algo?
— N-no, nada de eso... Yo...— ella se me quedó escuchando y viendo con sus ojos violetas lo que me ponía más nervioso — yo... Quería saber si ...  ¡Si te gustaría salir conmigo a caminar por el instituto!— terminé nervioso.

Ella me sonrió amablemente.

— Claro, he estado ocupada estos días, creo que salir de la rutina y relajarme un rato me vendría bien.
— Me alegro.

Ella me tomó de la mano a lo que me puse más tenso y nervioso.

— ¿A dónde vamos?
— Eeeh... Este... ¿Te parece ir  por unas bebidas?
— Si, claro.

Fuimos al segundo piso para ir por las bebidas. Una vez llegamos a las maquinas pagué por dos bebidas, a ella le gustaba la de uva y lo sabía.

— Una bebida de uva para ti y otra para mi.
— Gracias  ¿Sabías que me gustaba el sabor uva?
— Te vi varías veces con bebidas sabor uva, así que lo supuse.
— Ya veo.— reía, yo me sonroje y le di un trago a mi bebida — ¿Y a dónde vamos ahora?
— Me gusta ir al jardín aveces... Es relajante la verdad.
— Me parece bien, a mi también me gusta ir a donde las plantas.

Nos dirigimos al jardín mientras hablábamos tranquilamente sobre ideas para actividades para el club.

— Amo el aroma natural de las plantas.— dijo al llegar mientras se estiraba.
— Si, es muy agradable la verdad.
— Hace mucho que no hablamos de cosas que no tengan que ver con el club.
— Creo que sí. — me reí.

Nos sentamos en el pasto y comenzamos a charlar.

— La verdad este tema de los suicidios y la desaparición de Amai-chan me asusta bastante. Todas esas chicas... No merecían esto.— comentó.
— Lo sé, Kizana y Osana... Jamás imaginé que harían algo así, Kizana tenía un gran futuro en el teatro y parecía satisfecha con ello, y Osana... Quizás hubiera estado un tanto rebelde y cambiada, pero... ¿quitarse la vida?

Hubo un silencio incómodo entre ambos.

— Solo espero que al menos Amai-chan esté bien.
— Estoy seguro que si, ella está viva, la encontraran.— la tomé de la mano y le sonreí. Aún que la verdad moría de vergüenza por dentro.
— Gracias Shin-kun... Pero... Me preocupa Taro-kun la verdad...
— ¿Yamada-kun? ¿P-por qué?— noté que se había ruborizado.
— Bueno... Él... E-era amigo de esas chicas ¿no? Me dijo que se ha estado sintiendo mal por ello, piensa que cada vez que quiere a alguien algo malo pasa. No quiero que piense en eso... Él... É-el es... Un gran chico.
— Ya veo.— bajé la mirada, la verdad me de solucionaba un poco todo esto, pero no me rendiría. — veo que acabaste tu bebida, déjame ir a botarla.

Agarré ambos envases y me dirigí al tacho de basura que había. Me sentí mal al saber que ella en verdad estaba interesada en Taro, no sé que le ven todas... ¿Será por qué es un chico bastante agradable? No lo sé. Cuando volví de botar los embaces de jugo vi a Oka-chan viendo atenta a una rosa que había en una maceta.

You Don't Own Me | BudoxAyano [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora