N.A: Se los digo desde ya, este es un capítulo bieeen sad. Lo dividiré en tres partes para que no resulte muy largo y bueno, aquí va.
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Y mientras te sostenía en mis brazos,
solo podía repetirme en la cabeza:
¿Por que lo hiciste, Yuu-chan?
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Tres días.Cuatro meses.Dos semanas.
Y doscientos treinta y dos segundos.
Ese era el tiempo exacto que Mikaela llevaba sin hablar con Yuu. Y no es que Mika contara el tiempo, o que a pesar de su negativa de hablarle o su furia no explicada hacia él, lo observara desde un rincón, pero poco a poco Mikaela se dio cuenta de que en realidad, su vida, sus amigos, los niños del orfanato, su existencia entera no era lo mismo si no estaba él.
Entonces supongo que debería hablarle...--pensó Mika, mientras lo miraba de forma furtiva por enésima vez. Yuu le sonrió un momento y le invitó a acercarse con un gesto de la mano pero entonces Mika recordó ese día en el parque y su mano en su mejilla, y las palabras que brotaron de esos labios que quería-en serio quería- besar.
Eres mi mejor amigo, Mika.
Amigo.
Mejor amigo.
Mika no tenía muchos amigos pero valoraba mucho a los que tenía por que todos eran de verdad. Desde Akane que de vez en cuando le ayudaba con las tareas, hasta Kurusu Makise que le pasaba dulces por debajo de la mesa, e incluso el mismo Yuu-chan.
Por que era su amigo. O al menos lo había sido. Por que Mika había luchado mucho por que lo fuera, sonriendo aún cuando tenía sueño o estaba cansado, preguntándole cosas, y siendo amable de verdad. Más amable de lo que de por sí ya era a fuerza de costumbre, solo para estar con él.
Pero aquello no había funcionado. Al menos no del todo. Por que aunque un par de meses atrás habría brincado de alegría al oírle decir aquella bendita palabra, ahora, luego de besarlo para que dejara de llorar, luego de sentir ese calor extraño que sentía siempre que estaba con él, aquel sueño le parecía estúpido y poco brillante, como las purpurinas de colores que las niñas siempre solían llevar.
Por que no quería a Yuu como un amigo. Al menos no como a uno corriente. Aunque tampoco tenía mucha idea de cómo lo quería en realidad. Si hubiera sido una niña quizás lo habría querido como...pareja. Pero ambos eran niños, niños pequeños, Yuu más que él, niños varones los dos, y hasta dónde sabía los niños varones no se querían así.
Cerró los ojos un momento y entró al baño sintiéndose aturdido y extrañamente acalorado, como si hirviera a pesar de la ventisca violenta que azotaba el mundo a su alrededor. Se aflojó un poco la camisa y un niño que también estaba en el servicio le preguntó si estaba bien.
De maravilla--le había dicho, con sarcasmo-- ¿Que no ves como bailo de la felicidad?
Lo siento--le dijo el niño, que luego de su aturdimiento Mika pudo reconocer como Yuu-chan--Lo siento, Mika--repitió luego de un rato, mordiéndose la mejilla y apartando la mirada-- Por lo que sea que haya hecho, lo siento ¿vale? Haz estado raro desde ese día en el parque, ¿de acuerdo? Y no sé que es lo que está pasando contigo pero quiero que sepas que...
No es tu culpa-- lo interrumpió Mika, levantándose y tratando de irse aunque se sentía aún peor que cuando entró-- No es tu culpa, Yuu-chan. No es tu culpa, ni estoy molesto contigo ¿de acuerdo? Así que deja el tema en paz.
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Eternity //MikaYuu (Reescrito)
RomanceMika es uno de los huérfanos del orfanato Hyacura. Yuu es el niño nuevo al que no le cae bien. Sin embargo, y conforme pasa el tiempo, una conexión extraña se desarrolla entre ambos, por que después de todo.... "El verdadero amor no muere, es ete...