Solo por ti (Italia #5)

Capítulo 16

–Así que el lanzamiento de la nueva temporada –soltó Beth despacio, mientras ingresaban al evento–. Que interesante.

–En mi defensa... –Lucian inspiró hondo– realmente quería que vinieras conmigo, Beth.

–Sabías que diría que no –reprochó–. ¡Te dije que no quería complicaciones, Lucian!

–Beth, no es el momento... –él advirtió, volviendo a su rostro de "televisión", como ella estaba empezando a notar–. Aquí también hay medios de comunicación.

–Sí, aún siguen siendo demasiados testigos –soltó sin una pizca de humor–. Esto no te lo voy a pasar, Lucian.

–Habrían cámaras de televisión... ¿qué pensaste que sería?

–¡No lo sé! Solo, no lo pensé bien –Beth elevó su rostro y lo miró con desdén– ya estoy aquí, no pienso hacer ninguna escena. Trataré de mantener un perfil bajo, aunque a tu lado, no sé si lo consiga.

–Bien, se termina la discusión –Lucian le tomó del brazo–. Acerquémonos.

–Por ahora... –advirtió Beth mordaz.

El evento no era del interés de Beth. O al menos eso le pareció. No tenía la menor idea de qué trataba la serie, unos cuantos capítulos sueltos no servían de nada, imaginaba, además que ver a Lucian con otras mujeres la incomodaba. Terriblemente. Esto no iba a funcionar. Lo que fuera que tuviera con Lucian, no iba a resultar.

Lucian observó que Beth tenía una ligera sonrisa en su rostro, sin embargo sus ojos reflejaban un aburrimiento increíble. Él no pensaba que la serie fuera tan... mala. Realmente su actitud era un poco molesta, porque se trataba de su trabajo, por lo menos agradecería algo de aprecio por ello. Y, su rostro cambiaba por unos segundos, cada vez que él aparecía. Pero lo que podía ver en él, era de lejos halagador.

–Podemos irnos ahora –Lucian le dijo y Beth no pudo reprimir un suspiro de alivio–. ¿Finalmente, verdad? –preguntó fríamente.

–Sí –contestó con sinceridad, extrañada por la actitud de él.

–Solo me despediré de unas personas. Espérame aquí –y la dejó.

Beth ni siquiera tuvo tiempo de contestar y él ya se alejaba. Ella no tenía porque soportar eso, después de la terrible noche que había pasado. Así que decidió que no lo esperaría.

–Bueno chicos, creo que... –Lucian se acercó a despedirse de los otros protagonistas Nick, Donovan y Derek.

–Creo que tu cita se va –interrumpió Nick con una risita.

–¿Qué? –Lucian giró y se dio cuenta que Beth estaba saliendo por una puerta lateral.

–¿Acaso la obligaste a venir? –Derek se burló.

–¿No es la italiana de la fiesta? –preguntó Donovan, observador.

–Regreso en un momento –sonrió Lucian y se alejó a grandes pasos.

–Lo va a volver loco –comentó Donovan pensativo.

–Ya está totalmente loco por ella –corrigió Derek– es evidente.

–¿Y cuánto creen que tarde en notarlo? –terció Nick.

Beth sintió que una mano le aprisionaba el brazo, con rapidez. ¡Sabía que había escuchado pasos detrás de ella!

–¿Nuevamente siguiéndome, Lucian? –inquirió con tirantez, recordando lo sucedido en su fiesta de cumpleaños.

–Tal parece que se convertirá en un hábito –contestó él y la atrajo hacia sí– ¿por qué no puedes esperarme un instante, Beth?