Es más que una calle, es una mini ciudad!

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Entonces me lamenté de haber entrado en esa calle, de haber seguido a ese chico, de ser tan curiosa, esos chicos que comenzaban a invadir mi espacio personal, me daban asco cada que los veía, sus rostros eran repulsivos, estaba asustada. 
En eso una voz que provenía detrás de los chicos asquerosos se reveló. Todos nos quedamos en pausa y atentos a ver quién era la persona que emitía esa voz. Lo que dijo también nos dejó un poco impactados, ninguno de nosotros se lo esperaba: Ya dejenla idiotas. 
Y debido a eso más ganas de saber quién era me dieron. Entonces los asquerosos se pusieron a un lado, dejando al chico de cabello de oro justo al frente de mi, sonriendo. Me qué atónita pues ese era otra persona, no era el chico que simulaba ser en clase. 

-quién les dio permiso de abusar de la señorita?.-les preguntó un tanto enfadado 

-lo sentimos mucho señor, no sabíamos que la conocía.-dijo uno de los hombres 

-no importa si la conozco o no, saben que no pueden hacer nada sin mi autorización, y mucho menos algo por el estilo.-sonaba como si los estuviera regañando.-ahora larguense.-esta vez como una orden la cual no cuestionaron y se fueron.

Al parecer mi chico misterioso era el jefe de los violadores, de los vendedores de droga ilegalmente a menores, y vendedor de órganos en el mercado negro. Y yo creyendo que solo es un chico con problemas emocionales. 

-muy bien.-dijo observandome.-me puedes explicar porque has estado espiándome?.-dijo y acompañó la pregunta con una linda y juguetona sonrisa torcida 

-no te he estado espiando...

-no... tampoco me has seguido hasta aquí.-dijo con sarcasmo 

-no, yo vine aquí porque era un reto de un amigo 

-si? haber, cuentame el reto

-am, pues debía estar dentro de esta calle durante varias horas...

-a cambio de qué?

-de unos chocolates.-él soltó una risotada que hizo que me avergonzara

-en serio todo esto por unos chocolates?? quieres saber lo que te hubieran hecho esos chicos si no hubiera llegado??

-ya se... 

-pero tan solo llevas 7 minutos aquí, aún te falta un largo tiempo, qué te parece si te llevo a un lugar seguro en esta misma calle?

-eso es posible??.-volvió a reír 

Lo acompañé a pesar de que no había ningún reto. Aquel chico era lindo sin embargo muy engreído, dudo que me agrade al 100%. 
Lo que creía que era una calle era más bien una ciudad, o algo mas pequeño, jamás habría creído que esa calle levaría a un lugar con mas personas, muchas personas, aunque todos estaban metidos en los mismo líos.
Al final de un largo tiempo caminando, alrededor de una hora, volvimos al mismo lugar en donde comenzamos. Al principio me vi algo confundida, luego él me lo explico todo.

-de verdad creíste que te llevaría al lugar en donde siempre estoy?.-preguntó con un tono burlón, lo cual hizo que me enfadara.-tranquila, de todas formas ya duraste mas de una hora aquí, ve por tus chocolates princesa

Estaba muy molesta, pero no le respondí nada, solo camine fuera de aquella calle y rumbo a mi casa. 


Los Secretos De AdamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora