Capitulo 55

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Aime llevaba paseándose furiosa ya unos minutos por toda la oficina de Shaina. Se había encerrado con ellos tan pronto los vio entrar con lentes obscuros, los labios partidos y una bolsa de hielo en la mano al comedor para desayunar. En realidad los seis habían entrado de la misma forma, pero no se veían tan mal debido al amortiguamiento de las protecciones para la cabeza y los guantes, mientras que Rick y Brian se habían terminado peleando sin ellos, provocando romperse la boca, golpes más profundos y cortadas.

Las otras chicas escuchaban detrás de la puerta. Les era muy divertido ver la parte enojada de Aime, o en este caso, escucharla.

Brian estaba sentado relajadamente en una de las sillas con una bolsa de chicharos congelados sobre un lado de su cara y Rick estaba sentado en la silla de junto con otra bolsa de vegetales congelados sobre el lado opuesto. Ambos traían vendoletas en los labios y las costillas vendadas fuertemente. James los había ayudado a hacerlo recordando lo aprendido gracias a todas las peleas callejeras que había tenido en su juventud.

Ambos estaban esperando la reprimenda de Aime.

Brian acerco su silla a la de Rick:

- Ahorita se va a parar detrás de la silla... - susurro. Rick asintió

- Y va a azotar ambas manos en escritorio... - contesto Rick. Brian movió su cabeza afirmativamente.

- Y nos va a lanzar su famosa mirada... - susurro Brian y Rick se intentó reír pero le dolía al hacerlo.

Cuantas veces ambos no habían estado en esa misma situación por diferentes motivos, pero la técnica no había cambiado. Ya sea como Aime o como Lisa, los gritos eran los mismos y para colmo exactamente igual que como Donald Hayes había reganado tantas veces a Karl en su juventud. En lugar de estar asustados se estaban riendo como cómplices de travesura.

Aime se dio cuenta de que ambos murmuraban algo, se acercó a la silla y azoto su manos en el escritorio. Tal como ellos dijeron.

- Pero qué demonios estaban pensando! – grito – Ya me tienen harta los dos! Tu Brian me prometiste no molestar más a Rick hasta que terminara el evento! Y tu Rick... Deberías respetar la hospitalidad de esta casa y a mi esposo! Es que acaso no hablo perfectamente claro para ustedes? O en que idioma quieren que les hable? Parece que estoy en una guardería con niños de 3 años!...

Los chicos solo se vieron con su único ojo bueno y sonrieron.

- ...Estoy muy decepcionada de ustedes dos! Y como no quiero que los dos estén bajo el mismo techo para que esto no vuelva a pasar quiero que me digan inmediatamente quien empezó esto para que se busque un cuarto de hotel! – Cada vez gritaba más fuerte – Díganme quien tuvo la grandiosa idea de lidiarse a golpes como dos estúpidos!

Los dos se miraron y se cruzaron de brazos en claro gesto de desafío. Ninguno iba a delatar al otro.

Esto solo hizo que Aime se enfureciera más.

- Son ustedes imposibles! Mátense de una vez a ver si así ya puedo tener un poco de paz y tranquilidad! - Dijo dirigiéndose hacia la puerta haciendo que todos los que estaban atrás de ella salieran corriendo de regreso al comedor – Y no sé qué van a hacer, pero no los quiero ver en todo el día me escucharon? A ninguno de los dos!

Abrió la puerta de la oficina y azotándola lo más fuerte que pudo salió rumbo a su habitación donde se encerró con llave.

- Se ha suavizado con el tiempo – Dijo Karl

- De verdad? Es que tal vez no la has visto en su mejor forma. Ha hecho temblar hasta a los zentraedi. – Dijo Rick

- Si te creo.- Dijo Karl – Pero si no te molesta... dejaremos esta conversación para después. No he dormido y me duele todo. Pegas duro.

Mas alla del tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora