- Danielle, contesta, contesta, contesta, Contesta. - se podía escuchar a Sarah hablar y hablar por el altavoz.
- Oh por dios, ¿Que hice? - grito Danielle abriendo los ojos y mirando a Justin acostado tranquilamente junto a ella.
Sarah seguía suplicando en el altavoz que le respondiera la llamada. Justin se levantó asustado y Danielle se cubrió con una bata para dormir, oh por dios ¡estaban desnudos!
- Veinte y cinco llamas perdidas. - dijo Justin mirando su celular móvil y cubriendo su entre pierna con una almohada.
- ¿Que te pasa? ¡vístete! - le grito Danielle arrojando su ropa.Justin se sonrojó y tomo la ropa, tirandose al suelo para vestirse.
- Danielle responde por favor ¿dónde estas? Justin no vino a dormir anoche, creo que me está engañando, a las personas sexys también las engañan...
Justin le suplicó que no tomara la llamada. Pero Danielle se sentía sumamente culpable, nunca pensó que una confesión en broma los llevaría a la cama y peor aún que sería con el hombre de su mejor amiga. Estaba yéndose al infierno por traicionar su amistad a sus espaldas.
- Justin, esto no debió de haber pasado. Mira lo que le he hecho a Sarah y a ti. - dijo arrepentida sudando entre contestar la llamada.
- No sólo fuiste tú Danielle. Escucha, todo estará bien, estará bien todo. - Dijo y se quedo en silencio queriendo decir algo, pero prefirió marcharse.El teléfono sonó una vez más y al ver a Justin cerrar la puerta detrás suyo, atendió la llamada de su amiga preocupada.
- ¿Hola? - respondió Danielle con un tono destrozado.
- Oh, Danielle al fin respondes. - dijo Sarah. - Justin no vino a dormir, espero que lo hayan matado o metido a la cárcel.
- Sarah, no digas eso. - Danielle sostuvo el teléfono en su oreja y su hombro mientras tendía la cama.
- ¿Crees que me está engañado? - pregunto en un tono triste Sarah.
Danielle recibió la puñalada y permaneció en silencio antes de mentirle a su amiga negándolo.- ¿Lo viste ayer saliendo del bar? - insistió Sarah.
- Si, lo vi estaba con su amigo... ¿Cómo se llamaba? - titubeo Danielle.
- Jeremy. - respondió.
- Ah, sí claro. Estaban viendo deportes. - mintió.
- ¿Deportes? ¿A las 2 de la madrugada?
- Eso creo.Danielle no podía sentirse peor, se sentía la peor discordia del mundo, la persona más ruin y traicionera del mundo, ¿lo peor? Que tenía que lidiar con ese remordimiento por el resto de su vida, mientras mira a sí mejor amiga siendo feliz con el hombre que ella ama.
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El novio es mío - J.b
FanfictionLos amores prohibidos se respetan, pero éste me vuelve loca.