El novio es mío - J.b

Cap. 31

Danielle por fin se había dado cuenta de todo, en ese preciso momento. Justin se dio la vuelta para volver al interior de la casa, mientras ella permanecía decepcionada bajo la lluvia, entonces supo que simplemente fue la "otra" la diversión del momento, había sido parte de esa emoción de probar algo prohibido a escondidas de Bieber.

Así parecía ser. Debió escuchar a Ryan, aunque por otra parte ella había tenido más valor del que creía tener. Haberle pedido que cancelara la boda e hicieran una vida juntos. En fin, no todo se puede en esta vida y lo poco que haya durado, fue lindo, aunque sólo fuera un juego.

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Habían pasado unos cuantos días, Danielle no sabía nada de Justin, ni él de ella. La boda sería en un par de días más y aún no estaba preparada para esto, necesitaba despejarse de todo y tomar un respiro.

Cerró el computador y se decidió por visitar a Ryan, hasta Londres. No había estado tranquila desde aquella vez que discutieron y él merecía una disculpa.
Despejo los pendientes que tenía de trabajo y salió directamente hacia su casa.

Justin no la había vuelto a llamar desde entonces, por lo que supuso que lo que había ocurrido entre ellos había terminado, como todas las aventuras tienen que terminar antes de llegar al altar.

Sarah tampoco la había llamado, así que sentía un alivio de no tener que verla con Justin, por ahora.

Al bajar las escaleras eléctricas del aeropuerto, Ryan ya la esperaba ahí. Ella apenas y esbozo una sonrisa, mostrando un pequeño letrero con la palabra "Lo siento" a lo que él levantando también el suyo le respondió "Yo también".

Al estar frente a frente Danielle le entrego una caja con la comida deliciosa que siempre solían comer juntos.

- ¿Quieres matarme, verdad? - Ambos rieron y caminaron juntos.

Al estar fuera de la nueva casa de Ryan Danielle recibió una llamada, de Sarah.
Miro molesta el celular y suspiro profundamente antes de responder, mientras Ryan la miraba atento.

- ¿Hola? - dijo Danielle.
- ¡Danielle! ¿Dónde diablos has estado? Habíamos quedado que hoy sería la prueba de peinado y maquillaje incluyéndote.
- Sarah, no puedo... Estoy en Londres.
- ¡¡¿Que?!! Mi boda es en una semana y tú estas en Londres. Tienes que venir ahora, ahora, ahora. - gritaba mientras le exigía.
- NO. - le respondió Danielle y colgó la llamada.

- ¡woow! - dijo Ryan al ver que Danielle por fin se estaba haciendo respetar.

Ambos habían pasado el día entero juntos, Danielle se había hospedado en casa de su mejor amigo. Habían cocinado juntos y cenaron una deliciosa pasta. Desde antes de entrar a la universidad y separar un poco sus caminos no habían tenido una noche así de maravillosa.

Danielle se olvidaba de sus problemas gracias a las idioteces de Ryan, era tan cómico. Era muy gracioso en verdad, podía decir tanta verdad de una manera sarcástica, eso le hacía más encantador que Justin, aunque a diferencia del ojimiel, Ryan no gustaba de tener relaciones amorosas, le temía a los compromisos, no toleraría jugar con el corazón de una chica sin tomarla enserio, es por eso que jamás accedió al amor de Claire.