Dos Peligrosas Semidiosas En El Campamento Mestizo

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Narra Valen

Lo bueno de tener a Leo como... Bueno, novio no oficial, era que podía ayudarte en tus bromas.

Así que mientras yo robaba vasos de la cocina y le pedía ayuda a Percy (que obviamente me ayudo, ya que no quería ser víctima de mis bromas), Leo preparaba una cucaracha gigante a la cual podríamos manejarle con un control.

Gracias a los hermanos Stoll conseguí muchas arañas (de hecho se las robé) y ¡Listo! Broma preparada.

Mientras Alma dormía por la mañana coloqué todos los vasos en el piso de su cabaña y con ayuda de Percy los llené de agua.

Con Leo nos pusimos en un lugar donde Alma no nos viera y  cuando vimos que se despertó soltamos las arañas y ella empezó a gritar.

Alma: ARAÑAS! AYUDA! NICO! JASON! ALGUIEN! -se subió a la cama y empezó a gritar.

Yo me aferre a Leo porque vamos, si a Alma algo le daba miedo a mi también.

Leo agarró el control e hizo a la cucaracha volar hacia Alma. Esta grito aún más y en un intento de huir de la cucaracha se cayó de la cama, sobre todos los vasos de agua, clavándose estos.

También se golpeó con la cama de al lado, y se escuchó hasta en china.

Y como si fuera poco, al caer golpeo muy fuerte su cabeza contra el piso, cayendo inconsciente.

Yo: ALMA! -Grité y fui hacia ella, arrastrándola de allí. Leo me siguió y me ayudó a llevar a Alma a la enfermería. - Will! Rápido!

Will: Que pasó? -llegó alarmado y al ver a Alma estaba en ese estado llamó a otros hijos de Apolo. - Que rayos le paso?

Yo: Broma.. Mal hecha... Yo... No quise... SOLO AYUDALA Y YA -dije preocupada.

Menos mal que los vasos eran de plástico y no de vidrio, porque si no las heridas serian mucho más graves.

Estaba llena de raspones y según lo que Will le dijo a sus hermanos tenia un brazo roto, además de que se había abierto un poco la cabeza.

Leo me sacó de allí ya que supuestamente estaba fastidiando su trabajo con mis comentarios.

Idiotas.

Una vez afuera me solté de su agarré y me di vuelta, caminando enojada hacia el bosque.

Leo: Valen... -sentí sus pasos atrás mio pero no me di vuelta. -Valentina... -seguí sin siquiera mirarlo una vez. -No puedes ir al bosque desarmada, algo te puede pasar.

Yo: primero que todo tú no me dices que puedo y no hacer -me di vuelta poniendo un dedo en su pecho- y segundo, no me importa lo que me pueda pasar a mi si Alma esta así por mi culpa. -dije enojada y luego solté un sollozo, abrazándolo. -Lo siento.. Es que.. Alma es muy importante y saber que yo le hice eso...

Leo: Ya, te entiendo. -me acarició la espalda y llore sobre su pecho.

Yo: Es que si algo le pasa sera mi culpa y no podre vivir con eso -dije entre sollozos-

De pronto sentí que las sombras nos rodeaban y Nico apareció.

Nico: Tú -me señaló acercándome.

Abracé más a Leo y él se puso frente a mi en actitud protectora. Pero Nico lo apartó enseguida y me arrinconó contra un árbol.

Nico: Si algo le pasa a Alma... -me dijo enojado y yo lo empuje.

Yo: Mira niño muerte, no sé quien te crees tú pero yo soy la mejor amiga de Alma desde pequeñas y si a ella la pasa algo a mi me preocupara el doble que a ti, así que mejor te callas y me dejas en paz porque no eres el único afectado en esta situación. -tomé aire. -Y que quede claro que lo que hice no fue intencional, porque si lo hubiera sido la culpa ya me hubiese matado. Así que te callas y me dejas en paz o nos apoyamos mutuamente.

Me senté contra un árbol y ambos chicos se sentaron a mi lado.

Leo: Se pondrá bien, el campamento la ayudará y ella se recuperara, si? -nos dijo a ambos.

Nico: es que.. Con solo pensar en el dolor que va a sufrir cuando despierte me pone mal.

Yo: Era sólo una broma.

Nico: Una broma que terminó mal.

Leo: Por eso no me gustan las bromas... -dijo y con Nico lo miramos. -Bueno si me gustan, solo quería adaptarme al ambiente.

El hijo de Hades y yo negamos divertidos para luego ir a la enfermería.

Decidíamos que nos turnariamos para cuidar de Alma y Leo me acompañaría en mis turnos.

Espero que pronto despierte.