Eran las ya pasadas 2 de la mañana, intentó entrar haciendo el menor ruido posible, aunque le fue imposible por el oso gigante y el ramo de rosas que tenía en las manos, cerró la puerta tras de si con el pie, creyendo que su objetivo de pasar desapercibido había sido cumplido
-Es tarde -dijo Jason recargado en la chimenea, Tim no lo vio en ningún momento exceptuando el ahora claro está, se mantuvo serio aunque estuviese claramente nervioso, Jason lo ponía nervioso, de muchas maneras.
-Lo es - sigue su camino tratando de evitar al otro e ir a su cuarto, fue parado la mano de Jason, jalandolo, causando que los regalos se cayesen, volteo molesto a ver a Jason.
-Por qué... - no pudo terminar su frase , Jason lo había jalado hacia el quedando demasiado cerca , levantó la vista hacia los ojos de jason, se podía ver el enojo en ellos
-Quien te los dio? - su voz sonaba dura, reflejaba lo mismo que sus ojos.
-Alguien -respondió Tim, no sabiendo que esto aumentaría el enojo de Jason, pero la verdad con Jason nunca se sabe.
Jason dio un paso adelante, él retrocedió, esto se repitió mientras ellos hablaban, pareciendo esto un baile coordinado donde la tensión era lo que se expresaba.
-Quien Te Los Dio?-repitió nuevamente pero esta vez hacía una pausa entre cada palabra, remarcando que su paciencia se estaba acabando, y Dios ayude al que tenga que lidiar con un Jason Todd enojado
-Un compañero de la universidad.
-Dile que ya no puede hablar contigo.
Dijo tomando a Tim de la cintura acercandolo a el, capturando sus labios en un beso posesivo, Tim al principio se sorprendió, intento pararlo, pero lo único que consiguió fue que Jason metiese la lengua a su boca. Seducido por la lengua del otro siguió el beso, enredo sus brazos en el cuello de Jason, al terminar el beso Jason paso a dar continuos besos en su cuello subiendo hasta llegar a su oreja, la cual mordió para susurrarle con voz ronca.
-Por que tu eres mio Tim
Esas palabras hicieron que empezase una revolución en su mente, sus rodillas camuflaron, y asintió sumiso.
Siempre has creído que mientras yo no este eres libre, te equivocas pajarito, tu me perteneces...
Tu eres mio
