Le apuesto al pájaro chico

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No sabía porqué pero Jensen optó por cargar al...eso al auto. La verdad, si no fuera por las alas, parecería un chico normal, bueno, un chico muy atractivo. Lo cargó hasta el asiento de atras y lo recostó suavemente, sus alas se habian reducido considerablemente de tamaño.

Encendió el auto y condujo, esta vez con mucho más cuidado, por la carretera hasta llegar a su hogar. Cargó al ser en sus brazos y lo recostó en su cama, las alas habían desaparecido completamente. Examinó su cuerpo en busca de fracturas pero solo encontro unos moretones y rasguños, seguramente del impacto que se dio contra el parabrisas y contra el pavimento.

Jensen cubrió el cuerpo, del ahora chico, con una sábana y lo observó un momento. Ese chico o lo que sea, era en serio hermoso. El rubio lo dejó dormir mientras él se instalaba en la habitación de huéspedes, no sin antes buscar en su computadora información sobre lo que sea que ahora dormía en su cama. Después de un par de horas de búsqueda, estaba convencido que eso no era un chico, ni un pajaro-chico, ese chico era un ángel. Jensen rio ante su conclusión pero paró en seco al darse cuenta que eso era definitivamente lo más probable.

-Oh, mierda -Se dijo para sí mismo el rubio tragando saliva. Se acostó en la cama y comenzó a dar vueltas pensando en esa idea y tratando de digerirla. Él no tenia tiempo para eso, no tenia tiempo para una mascota, ni para cuidarlo o atenderlo. Solo esperaba que ese "ángel" despertara, le diera las gracias con un pase libre al cielo cuando muriera y luego se fuera volando. Sí, seguro eso pasaria el dia siguiente. Jensen cerro sus ojos esperando despertar de ese extraño sueño que estaba viviendo.

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Jensen desperto al oír su telefono sonar. La pantalla decia: Misha, su mejor amigo y compalero de trabajo.

-Hola... -Sono la ronca y adormitaba voz de Ackles.

-¿Dónde estás? Tendrías que haber estado aquí hace media hora -Dijo su amigo exaltado.

-Soy el jefe, puedo llegar a la hora que quiera -Dijo petulante el rubio mirando la hora en el reloj junto a su cama.

-Dile eso a la empresa que cerraría hoy un negocio contigo -Dijo molesto Misha al escuchar a su mejor amigo.

-Encárgate tú del asunto, Mish, llegaré más tarde -Dijo Jensen levantandose de la cama y dirigiéndose a su habitación para comprobar si en verdad había pasado lo que recordaba.

-Pero Jen... -El rubio cortó la llamada antes de que su amigo terminara de hablar. Abrió suavemente la puerta de su habitación, encontrando al chico dormido en su cama. Al menos ahora estaba seguro que no habia sido ningún sueño. Jen lo observó dormir de nuevo, era raro, él nunca había pensado que un hombre era guapo o atractivo, pero ese chico frente a él, le parecia simplemente hermoso, nunca había sentido la necesidad de besar a un chico pero, rayos, los labios de ese chico frente a él simplemente eran tan incitadores.

Jensen aun lo observaba dormir cuando el chico abrió los ojos de pronto, el rubio se alarmo al ver el pánico en los ojos del chico, se miraba tan vulnerable e indefenso.

-¿Euq ogah iuqa? -Dijo asustado el ángel mirando hacia todos lados - ¿Ednod yotse? ¿Neiuq sere ut? -Jensen no pudo responder nada ya que no entendía lo que el ángel decia. El chico se levantó alborotado con lágrimas en los ojos -¿sereiuq emramitsal? -El ángel se alejó lo más posible de Jensen

-Hey, tranquilo -El rubio subió las manos mostrándole las palmas -No quiero hacerte daño -Dijo Jensen mientras se acercaba lentamente al chico para no espantarlo.

-Oreiuq ri a asac

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Lo que dice el angel simplemente sos palabras escritas al revés jajajaja xD

Mi pobre angelito {Padackles, J2}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora