Obey Us ; Clan Uchiha

❥ C A P I T U L O 13

Naruto — Masashi Kishimoto ©

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Los minutos transcurrieron desde aquella llamada, lenta y dolorosamente, sopesaba todos los posibles escenarios cuando Madara se diera cuenta, en todos ella perdía, y olímpicamente.

Escuchó un par de voces y se sobresaltó girando casi de inmediato.— Dios...—susurró — Me volveré loca.

Eve estaba en modo paranoia, faltaban escasos quince minutos para la hora, y cualquier ruido la exaltaba pensando en que tal vez era el idiota Uchiha o alguno de ellos llegando a por ella, daba vueltas sin parar en el lugar dónde se encontraba, si Natsume no llegaba en los próximos minutos acabaría por crear un cráter allí mismo.

— Oi.

Eve sintió un escalofrío subir por su espina dorsal hasta el cerebro, se giró completamente y la vista la dejó congelada, no lo esperó, de ninguna forma había esperado que él se apareciera, el chico solía desaparecerse de escena apenas terminaban las horas de clases, bien, ella solía desaparecer primero porque no quería verlo.

— Sasuke.

— ¿Que haces fuera de clases? — inquirió con aire supremo —. Deberías estar ahí.

Eve trató de recomponerse, apenas. — No teníamos un profesor que cubriera las últimas dos horas, es todo.

El azabache enarcó una ceja— Ya veo, entonces ven conmigo.

Eve se petrificó.—. ¡S–Sabes que a Madara no le gustará y me regañará a mi, idiota!

— Lo que ése zombie haga no me interesa, vamos —dijo para comenzar a caminar del lado contrario, ella se desesperó, en cualquier momento él llegaría y su plan iría por el retrete.

— ¡Eve!

Tanto Sasuke como Eve giraron al oír el resonar de una melodiosa voz.

— ¡Natsu! — chilló la ojiverde en su mente al verla, pero no era la única, por el rabillo del ojo vio que Sasuke la miraba intensamente.

— ¿Que estás mirando, idiota? —espetó la Takahashi al Uchiha.

— La cara de perra ebria traes —. replicó él con soberbia

— ¿Quieres ver lo que ésta perra puede hacer? —siseó amenazante curvando sus labios en una provocadora sonrisa.

— Hmph. Adelante — masculló de regreso con una mueca retadora.

Eve corrió lo más rápido que pudo llegando a trompicones junto a Natsume que se preparaba para eventualmente saltarle encima al moreno. — ¡Aquí no! —masculló mientras tiraba de su brazo —. Vámonos, por favor.

— Eve —llamó él ónix — ¿A dónde crees que vas?

La ojiverde no respondió y ambas mujeres comenzaron a correr hasta el automóvil, apenas llegaron Eve divisó otro auto aparcar a metros de ellas, de él descendió el actual jefe del Casino Uchiha, ambas miradas hicieron contacto y sus piernas comenzaron a temblar como gelatina.