Obey Us ; Clan Uchiha

❥ C A P I T U L O 10

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Sasuke e Itachi se encontraban pacientemente sentados en presencia de unos serios Fugaku y Mikoto, la tensión en el aire se hacía cada vez más insoportable, irrespirable y los jóvenes no entendían la razón de tan repentino llamado.

— Padre. Por favor, ¿sucede algo? — preguntó Itachi en representación de ambos hermanos.

— Sasuke e Itachi —inició —. Saben que es lo que se celebra en un par de meses ¿verdad?

El progenitor vio —prácticamente— estampado en el rostro de Sasuke la confusión del que estaba siendo preso a causa de lo que el hablaba y era lo más lógico, aún era demasiado joven, mientras que Itachi frunció el ceño dándole a entender que sí, él lo sabia.

— Cada diez años, el Clan Uchiha celebra un solemne acontecimiento, la sucesión —, musitó ante la atenta mirada de la familia —. Conocido también como Ojo de Luna.

— ¿Sucesión? ¿Ojo de Luna? — inquirió Sasuke aún sin comprender del todo.

— No es de sorprenderse que no lo conozcas, Sasuke. Aún eras muy pequeño cuando la última sucesión fue celebrada — siguió —. Itachi estuvo presente, cuando yo tomé el liderazgo del Clan al casarme con su madre.

— ¿Y que tiene eso que ver con nosotros? —. reprochó el menor.

— Mucho. Sasuke, y también Itachi ustedes tienen el derecho aspirar por la sucesión de nuestro clan, éste año —, respondió con un tono molesto —. pero no solo ambos están en la lucha por el puesto.

— Madara — murmuró Itachi y el líder asintió.

— Como saben nuestro Clan se compone de cuatro grandes familias, la de Tajima, Kagami, nuestra y la de Kazuo — dijo mientras se cruzaba de brazos —. Los demás no tienen derecho a aspirar.

Sasuke al comenzar a captar intentó replicar pero una mano en su hombro lo detuvo, Itachi negó con suavidad calmando momentáneamente al azabache.

— Tajima tiene a Madara e Izuna, Kagami apuesta por Shisui, Kazuo tiene a Obito —, pausó por un instante —. Y yo los tengo a ustedes.

— Suena interesante — habló el Uchiha menor con una sonrisa autosuficiente —, ¿Que es lo que tenemos que hacer?

— Casarte — respondió Fugaku con total normalidad. La autosuficiente sonrisa de Sasuke desapareció de la misma manera en la que llegó —fugazmente—.

— ¿Casarnos? Pero eso lleva tiempo, encontrar a la persona indic– —. el azabache fue interrumpido por el líder.

— Tienes razón en ello, pero, como sabes, no tenemos tiempo —. musitó el padre.

— ¿¡Como nos dices eso ahora, padre!? — respondió exaltado Sasuke —. ¿Vamos a secuestrar a una mujer y hacerla nuestra esposa?

— Cálmate — pidió —. Tenía las esperanzas puestas en tu hermano y su novia Izumi, pero el decidió enviar al retrete nuestros planes y tuvimos que utilizar un plan de contingencia.