Capitulo 1

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-Señorita Kristen...

-¡Hola, Jack! –Sin pensarlo, corrí hacia él para abrazarlo.

-Cuanto tiempo, señorita...

-Sí, once meses para ser exactos. –Le sonreí de oreja a oreja para recoger mi bolso del suelo.

-... –Jack cogió mi maleta para meterla en el maletero mientras que yo me sentaba en los asientos traseros. –¿Y como ha estado?

-Bien... Aunque debo decir que este internado es más estricto que el otro.

-Me imagino... –Murmuró antes de cruzar la mirada un segundo conmigo por el espejo retrovisor. –Puede hacerme la pregunta que quiera, señorita Kristen.

-Mmm... ¿Cómo se encuentra mamá y el bebé? –Lo oí suspirar antes de que riera. –¿Qué pasa?

-Creí que me preguntarias otra cosa... –Volvió a reír. –Bien, ambos están bien. Su hermano es hermoso, señorita.

-Ya quiero conocerlo...
–Murmuré evitando su mirada para llevarla hacia la ventana. –¿Has visto a...

-No, señorita. No he visto al joven Christian desde que terminó su curso en el internado.

-¿Ni siquiera ha ido a ver a Dylan?

-Desgraciadamente, no.

-Joder... –Susurré más para mi que para él.

Verdaderamente tenía la esperanza de que su pensamiento cambiara cuando el bebé naciera, yo misma era la que iba a cambiar ese pensamiento...

-Llegamos, señorita. –Esperé a que Jack estacionara el coche frente a la casa para bajarme y caminar hacia la puerta.
–¿Kristen?

-¿Si?

-Mire en su armario en cuanto llegue a su cuarto.

-¿Qué? 

-Solo hágame caso, por favor.

-Vale... –Asentí aún confundida para entrar en la casa sin anunciar mi llegada. Ahora solo tenía cabeza para pensar en lo que Jackson me había dicho.

-¿Hija? ¡Hija! –Rodé los ojos en cuanto oí la voz de mi madre.
¡Pensé que aún no habías llegado!

-Sí, lo hice. –Me di la vuelta para encararla y recibir no muy convencida su abrazo.

-Me alegra de que estés aquí aunque solo sean las vacaciones de Navidad, cariño.

-Quiero conocer a Dylan...

-¡Por supuesto! –Me agarró de la mano para arrastrarme con ella hasta la segunda planta y llevarme hacia su habitación.
Míralo aquí.

Sonreí caminando hacia la cuna de madera que había al lado de la cama para inclinarme.

-Que cosita...

-¿A que si? Toma, cógelo.
–Mamá lo sacó de la cuna haciendo que el bebé hiciera pucheros para dármelo.
Cuidado con la cabeza.

-Oh, por Dios... –Murmuré meciendolo para que no llorara. –Hola, Dylan. Soy tu hermana...

El bebé abrió los ojos como si me hubiera escuchado para mirar hacia todos lados.

-Tranquila, eso es porque tiene hambre.

-Oh...

-Ven, bebé. Vamos a comer. ¿Quiéres darle el biberón tú?

-¿Puedo?

-¡Claro! Voy a buscarlo, enseguida vuelvo. –Clere salió de la habitación pasándome de nuevo al bebé para salir de la habitación.

-Ya, ya va, Dylan... Mamá fue a por la comida. –Reí aún sin creermelo. –Esto es muy raro, pero te quiero igualmente, pequeño.

•••

Después de haber cenado y haberme duchado, abrí mi maleta de viaje para sacar el pijama abrigado y ponérmelo.

-Que cómodo se está aquí...
–Murmuré una vez que me había acostado en la cama. –¡Ah! El regalo del que me había hablado Jack.

Me levanté rápidamente para abrir el armario y buscar algo que estuviera fuera de lo normal...

-¡Aquí está! –Volví a la cama para despegar con cuidado el papel doblado que había junto a la caja y leerlo.

"No sé si algún día llegarás a encontrar esto o no, pero era algo que te debía y aquí está. Quizás te esperabas una carta más extendida, pero no tendría suficientes hojas para explicar todo lo que siento. Felices dieciocho."

Cerré los ojos llevándome la hoja al pecho. No estaría firmada por nadie, pero yo sabía perfectamente de quién era...

Le quité el envoltorio algo desgastado y viejo al paquete para abrirlo y ver una hermosa cadena plateada de la que colgaba una pequeña estrella con brillantitos.

FLASHBACK

-Siempre me ha gustado ver las estrellas.

-A mi también. Si te digo la verdad, me relaja verlas.

-Si...

-Mira aquella.

-¿Cuál?

-Aquella que está al lado de la luna que brilla más que las demás. –Dijo estirando el brazo para señalarme una de las tantas estrellas que habían.

-Ah, si.

-Pues es tuya.

-¿Eh? –Giré para verlo.

-Bueno, no la he comprado, pero te la regalo.

FIN DEL FLASHBACK

Impossible L♥ve {#2} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora