Capítulo 19: La promesa que no pude cumplir

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En el capítulo anterior

-¿N-no hay noticias de Hinata?

-Como si la tierra se hubiera tragada a mi hija.

-Hiashi-sama, ella aparecerá

"Hyuga Mirai. Una amada esposa, madre y amiga"

-Oh Mirai te juro que si tuviera que dar mi vida para traer a Hinata sana y salva lo haría sin duda alguna, por favor cuídale desde donde quiera que estés.

Él es un Uzumaki Naruto y debía actuar como el hombre que decía ser y no fallar: menos con la chica de la cual estaba enamorado.

-Hinata tengo algo que confesarte así que espera por mí. Hinata, voy a salvarte, ¡Lo prometo!

~~

-Imposible –dijo el pequeño propietario de aquel cabello azabache

-Llamaré a mi padre –interrumpió el mayor de los cuatro jóvenes reunidos

-¿Por qué dejaste a mi prima abandonada? –cuestionó enojado aquel chico de cabello largo castaño de ojos perlados

-¡Por favor, deben ayudarme a hacer esto! –suplicó por última vez

Lo que pensaba que era una buena idea, ahora era solo una fantasía de su mente. ¿En qué momento el brillante plan que se dio debido a su brillante imaginación se salió de control? Naruto sabía desde un principio aquellas personas no eran las adecuadas para su pequeña misión, y de haber llamado a alguien más, todo hubiera resultado a como se estaban dando actualmente las cosas. ¿Por qué no podía ser como en los viejos tiempos ninja donde solamente necesitaba juntar a su equipo de misión para ir en búsqueda de la desaparecida? O al menos así se lo planteaban en la televisión y en los libros del colegio.

Había llamado a Uchiha Sasuke por ser su mejor amigo, a Hyuga Neji por ser primo de la desaparecida en cuestión y al hermano de Sasuke: Uchiha Itachi porque de alguna forma u otra necesitaba a algún miembro de la policía que los fuera a ayudar si la situación se salía de control. En su mente todos habían accedido a ir en esta misión de rescate y al final del día regresaban a la comisaría con Hizashi esposado listo para ser encarcelado de por vida, con una Hinata dispuesta para presentar la demanda contra el despreciable ser que se hacía llamar su tío. Lamentablemente Itachi insistía en darle los datos al Capitán y dejar que la policía se encargara de todo, Sasuke pensaba lo mismo que su hermano y Neji... bueno, Neji trataba de mantener la calma sin triunfo alguno, confundido porque su padre era el causante de todo esto pero principalmente quería destrozar a Naruto por el hecho de haber abandonado a Hinata.

-¡Ya sé Neji, sé que hice mal! Ahora solamente soy aquél pobre idiota poco hombre que dejó a Hinata abandonada y lo único que puedo hacer es tratar desesperadamente ir por ella –y todos pusieron los ojos en el rubio- sé que no fue lo mejor que pude haber hecho, sé que lo mejor es dejarle el trabajo a la policía... sí, que ellos salven a Hinata es lo mejor ¿qué podemos hacer nosotros? Dos chicos de 13 años, un adolescente cuyo padre es el acusado de todo esto y un casi adulto que por más que le suplique, ni de broma me dejará ir a donde está la víctima de todo esto...

-sé que la familia de Hinata la está pasando peor que yo –continuó Uzumaki- puede que el dolor que siento por haberla dejado lo merezco, porque no actué como el hombre que debía ser en ese momento pero por eso quiero hacer esto; no quiero pasar más tiempo tratando de pensar en cómo justificar mis actos de la noche pasada cuando la respuesta es simple: debo ir por Hinata, debo ser yo quien la ayude; yo le prometí que saldríamos juntos y no lo hice pero ahora sé lo que debo hacer, no es lo más inteligente y no puedo hacer esto solo pero, por eso les pedí que me apoyaran: se lo debo a Hinata. La única forma en la que podría remediar mi error es si yo la rescato.

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