CAPÍTULO 8

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[Editado]

MIKE.

La sorpresa no me habrá durado dos segundos, cuando correspondí al beso tomé el total control, Alex abrió la boca dando paso a mi lengua para intensificar el beso, exploré toda su boca y me tomé la libertad de acariciar su cuerpo, deslicé mi mano por debajo de su camisa y fui acariciando su piel, Alex se estremeció, pero no me detuvo así que continúe acariciandolo hasta llegar a sus pezones y me puse a jugar con ellos, eso pareció gustarle ya que soltó un gemido en medio de nuestro beso.

—Mike... —suspiró y me apartó un poco para recuperar la respiración—... yo... creo que me gustas —confesó sonrojado.

No pude evitar sonreír al escucharlo.

—Tú también me gustas.

Alex también sonrió. Me incline y le mordí el lóbulo de su oído. Soltó un quejido y retomé mi tarea de acariciarlo y besarlo, todo marchaba bien hasta que un pensamiento cruzó por mi mente.

Alex estaba ebrio.

Podría haberlo ignorado y tal vez habríamos llegado hasta el final, sin embargo, mi consciencia no me lo permitía, hice caso a la cordura y me aparté de él, me senté a un costado de la cama.

—¿Por qué te detienes? —preguntó confundido—, dijiste que también te gusto.

Me pasé una mano por el rostro y solté un bufido.

—Si me gustas y también quiero hacerlo, pero estás ebrio y probablemente mañana olvides todo.

—Eso no va a pasar.

—Si mañana recuerdas lo que acaba de pasar, entonces cuando podamos continuaremos con todo esto —asintió bostezando—. Ahora duérmete.

—Duerme conmigo —contestó agarrando mi mano—. Eso si podemos hacerlo ¿verdad?

—Claro –sonreí.

Le envié un mensaje a Zander avisando que me había marchado de la fiesta y que le informara a Danna que su hermano se quedaría conmigo. Apagué mi celular, no quería que alguien me llamara y nos despertara, me acosté al lado de Alex y nos cubrimos con las sábanas, lo abracé acercándolo hacia mi y no pasó mucho hasta que ambos quedamos dormidos.

Al día siguiente desperté temprano sin hacer ruido para no despertar a Alex, no estaba seguro de si él recordaría todo lo que sucedió, pero si no lo hacía y despertaba viendo que dormía conmigo comenzaría a gritar hasta dejarme sordo y también me golpearía hasta dejarme medio muerto. Salí de mi habitación y bajé a la cocina, Zander ya estaba despierto friendo un huevo para su desayuno y preparándose un café.

—Buenos días —saludé y solté un bostezo porque seguía con sueño—. ¿Mamá y papá aún no despiertan?

—Llegaron tarde ayer y salieron al amanecer, tienes suerte de que no te hayan visto dormir con Alex o ahora estarías siendo abordado por miles de preguntas.

—¿Eso te lo debo a ti? —me serví un café para terminar de despertar.

—¿A quién más seria? —asintió—. Ayer llegué casi a la par con ellos, les dije que estabas dormido y no entraron a tu habitación.

—Te debo una —me senté en la silla y bebí mi café.

—Y lo vas a pagar en algún momento —apagó la estufa y me observó con curiosidad—. Ahora dime ¿por qué Alex y tú estaban juntos?

—Él estaba ebrio y como no sé su dirección lo traje a casa.

—¿Y tenías que dormir con él en la misma cama? Podías haberlo dejado en la habitación de invitados.

I Feel The Same As You [Editando] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora