I Feel The Same As You [Editando]

CAPÍTULO 13

AMOR.

Antes de apartarme y dejar de besarlo mordí su labio inferior y eso lo hizo sonreír un poco, lo observé un instante, sus mejillas estaban coloradas y había un brillo en sus ojos. Un brillo que desapareció al ver mi expresión, yo no sabía qué expresión tendría pero bastó para que ese brillo que me gustaba desapareciera.

—¿Qué ocurre? —preguntó confundido.

—Tenía que estar seguro de lo que sentía.

—Pensé que me besaste porque tú también me querías —retrocedió unos pasos.

—No fue así.

Desvío la mirada y trató de huir pero lo agarré de la mano antes de que lo hiciera.

—¡Suéltame! —pidió tratando de deshacerse de mi—. Tú e-eres muy malo conmigo.

—Kyle, yo...

—¡No quiero oírte! —cortó—. No tienes que decirlo, ya lo sé, no me quieres, sólo suéltame para poder marcharme y estar solo.

Bufé y lo sujeté de los hombros.

—¡¿Por qué estás tan seguro de que no te quiero?!

—Bueno, tú... —desvió la mirada y guardó silencio.

—Kyle —lo agarré del mentón obligándolo a mirarme otra vez—. Te quiero ¿escuchaste bien?. Te quiero —le volví a repetir.

—¿T-tú que? —preguntó sin creerlo.

—¿Ahora estás sordo? —sonreí y le di un pequeño golpe en la frente—. Dije que te quiero.

Sonrió y se abalanzó contra mí haciéndonos caer a ambos al suelo.

—Eso dolió —me quejé—. ¿Podrías tener más cuidado?

—Estoy feliz —sonrió y me abrazó, no tenia pensado apartarse para que nos pudiéramos poner de pie—. Pensé que dirías que no sentías nada.

—¿Por qué?

—Por la expresión que tenías.

—Eso... Ya no importa.

No tenía caso recordar lo ocurrido en España, y sin darme cuenta Kyle ya me había ayudado a olvidar a esa persona.

NARRA DANNA.

Shon y Kyle estaban desaparecidos, y estaba segura de que ambos ya estaban juntos como una pareja, eso me hacia feliz. Kyle no lastimaría a mi primo como David lo había hecho, ambos estarían juntos por mucho tiempo.

—Creo que mi trabajo está hecho —me dijo Daniel—. El plan funcionó.

—No eres tan malo como pensé —le dije con una sonrisa—. Al principio me caías mal y ahora ya no tanto.

—Tengo mis encantos —sonrió.

—¿Y cuándo tienes pensado marcharte a Los Ángeles?

—No estoy seguro/ tal vez después de los exámenes o a fin de año —se encogió de hombros—. Dile a Kyle que lo veo mañana.

—¿Ya te vas?

—Si —asintió—, tengo que llamar a mi novia y contarle todo, la idea de decirle a Shon que yo estaba enamorado de Kyle fue de ella.

—Tu novia me cae muy bien, tengo que conocerla.

—Se lo diré.

Daniel se despidió y se marchó, segundos después Shon y Kyle volvieron, ambos se agarraban de la mano, confirmando lo que ya sabía. Sentí una mano tomar la mía, sabía de quién se trataba, era la mano de mi novio, el hombre que me ayudó a no odiar a mi padre ni a guardarle rencor.