John ya con la cuenta de 4 asesinatos, se dispuso a cometer aún más, pero esta vez con un sello para su marca personal.
Él, de cada asesinato sacaba algo que pertenecía a sus victimas para llevárselos como trofeos, así pensó en la gran idea de dejar esos trofeos en los cuerpos de sus nuevas víctimas, ya sean prendas, algún accesorio o lo que sea que llevaran en el momento los fallecidos.
Del vecino molesto, su primera victima, se llevó la lengua de éste porque lo reconocía como molesto e irritante al hablar, del cobrador se llevó el portafolios que éste llevaba en su mano derecha, de la mujer del cobrador llevó un perfume que la misma llevaba en ella, de Luisa, llevó un mechon de pelo, esos eran sus tan preciados tesoros a los que dejaría a sus nuevas víctimas.
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ESPÍRITU ASESINO. (EN PROCESO)
HorrorConoce la historia de John: Un hombre que desde su ñiñez vivió precariamente con su madre. Al crecer, se dió cuenta de que tenía una gran flexibilidad en su cuerpo, eso le dió la oportunidad de poder integrarse a un reconocido circo de su ciudad. P...