He's kinda hot〈 a.i. (Pausada)

Dile NO a los jugadores

Han pasado dos semanas desde que Ashton me propuso su extraño juego del amor.
No ha pasado mucho, solo un ocasional beso de buenos días y buenas noches.
Los chicos por ahora no sospechan nada. Tengo que admitir que deseo tener una noche a solas con Ashton, al menos para platicar normal con él.
Antonio me ha marcado varias veces, pero el día de hoy parece que se dio por vencido. No puedo salir con un chico como él, no lo sé, solo no me daba buena espina.
Esa mañana desperté sintiendo un bulto a mi lado.
-Quien quiera que seas lárgate a la mierda- dije mientras me cubría más.
-Creí que te gustaría verme en mi disfraz para este Halloween- escuche a Ashton decir.
Espera, que?! Disfraz?! Halloween?! Ya tan rápido es Octubre?!
Me destape y lo vi a mi lado en un horrible disfraz de un supuesto conejo.
-Ashton quisieras ir a la puerta para verte mejor?
El salió de mi cama y saltó hasta la puerta como si en serio fuera conejo.
Rápido tome mi teléfono y le saque una foto.
-Ash es muy temprano para estar burlándome de ti- le dije, pero inmediatamente me corregí -Espera, nunca es temprano para burlarme de ti!
Así que no pude aguantar más la risa mientras que él se acercaba a mí con cara triste.
-Eres mala.
-Y tú eres un tonto- le dije mientras le daba un beso.
-ES HALLOWEEN BITCHES!!- gritó Daniel entrando a mi habitación segundos después de mí beso con Ash.
-Espera, como llegaste aquí?! Como encontraste y lo más importante, como entraste a mi casa?!?!- exclamé preocupada.
-Vamos mujer, hoy en día rastrear celulares es fácil, y tus escondites de llaves me los dijiste el otro día cariño.
Intenté recordar aquello, pero antes de poder contestarle, él ya estaba sacando a Ashton de mi cuarto y abriendo mi clóset. Lo miró con desilusión.
-Corazón, sé que vives con cuatro hombres pero esperaba más de ti- comentó mientras abría mis cajones.
Decidí no darle importancia a sus palabras y tendí mi cama mientras el escogía mi Outfit de hoy. Me puse una playera blanca de manga larga con unos jeans azules y unos converse blancos, me puse una bufanda roja en mi cuello y agarré mi bolsa negra. Me amarré mi cabello en un chongo alto súper despeinado.
-A donde vamos como para vestirme así?- le pregunté, sentía que tenía mucho estilo, más del normal.
-Pues de compras claro, hay que ver de qué te disfrazaras para la fiesta en casa de Zaira.
-Espera, tú como conoces a Zaira??- le pregunté claramente confundida, apenas estaba despertando y eso era mucha información para mí.
-Y quién no la conoce? Canta súper agudo la niña y se volvió famosa por ello, aparte de que sus padres tienen barullo; cada año hace fiesta de Halloween en su casa y todos están invitados- me comentó.
Suspiré, claro que la niña era famosa, lo bueno es que era mi amiga, no como los colados que irían que solo iban para caerle bien y sacarle dinero.
Salimos de mi habitación, el bajó las escaleras todo feliz y yo baje las escaleras toda aburrida. No me mal interpreten, amo las compras, solo que nunca me han interesado los disfraces, aunque a estas edades un disfraz puede contar como un puti-short, un croptop y unas orejas de gatito.
-Me voy niños, nos vemos más tarde- grité e intenté escapar con Daniel, pero sentí los brazos de Mike en mi cintura y me cargó de regreso a la casa.
-A donde crees que vas?- me preguntó Calum con sus brazos en jarras. Me volvió a invadir el recuerdo de mi sueño en el que besaba a Calum y me estremecí.
-Me la llevo a comprar su disfraz de Halloween para la fiesta de Zaira a la cual no pueden ir porque son famosos- contestó alegremente Daniel por mi.
-Bien dicho-le dije y chocamos las manos.
-Alguien dijo fiesta?- Se asomó Luke del baño con su cepillo de dientes en la mano.
-May no quiere que vayamos porque la vamos a avergonzar- le explico Mike.
-Oh Mike, tú jamás me avergonzarías!- le dije -Ellos sí.
Mike hizo un baile de victoria, los demás solo rodaron los ojos. Me di cuenta que Ashton seguía con ese horrible disfraz de conejo.
-Apadte decueden qui tinemos entevita de radio- dijo Luke todavía asomado del baño con pasta de dientes por toda su boca, era asqueroso.
-Asunto resuelto, ustedes van a su cita en la radio y yo voy a comprar ropa con su dinero- dije esto último lo más rápido posible.
-Qué?!- gritaron los cuatro y salimos corriendo Daniel y yo a su auto.
-Lo hermoso de saber dónde esconden el dinero-saque unos £1000 de mi bolsillo.
Me miró con ojos pícaros, presionó el acelerador y nos fuimos con dirección al centro comercial.
Al llegar empezamos a ver toda la decoración extrema que hacía aluvión a la festividad de ese día.
-No pierden tempo estas personas- murmuré y Daniel me vio con ojos de "qué esperabas?", bajamos del coche y nos dirigimos a la primera tienda de veinte mil que me haría ver.