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XIV. ━━ sin control.
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Había sido una larga mañana. Comenzando con que Dakota le insistió a su sobrina que debía usar algo diferente que su habitual chaqueta de cuero para el evento de esa mañana. Olivia había hecho su mayor esfuerzo en verse presentable, era una niñería, incluso se sentía un poco ridícula, pero quería verse bien, quería ir y fingir un poco de normalidad por un rato. Iba a volver a su papel de prófuga después, pero justo en ese momento solo quería sentir tranquilidad de ver a sus amigos graduándose. Aquello fue un golpe duro para ella, saber que ella nunca iba a hacer nada de eso: ponerse un lindo vestido, arreglarse el cabello y usar la famosa túnica de graduación para pasar enfrente por un pedazo de cartón. Era absurdo que se pusiera melancólica por algo que siempre supo que no obtendría, pero la realidad es que dolía más verlo y no poder ser parte del momento realmente.
—¿Ves lo linda que luces con un poco de lápiz labial y el cabello recogido? —Dakota le dijo a su sobrina que seguía algo dudosa de su aspecto—. No malinterpretes mis palabras, eres hermosa, pero justo ahora, parece que veo a otra Olivia.
—Me siento extraña —Olivia se quejó mientras acomodaba su brazalete intentando calmar sus propios nervios.
—Ese novio tuyo se va a sorprender cuando te vea.
—No es mi novio —Olivia le aclaró.
—Parece serlo —Dakota pronunció burlona.
Olivia rodó los ojos sin responder a la pregunta y se acercó a su tía, quitándole de un solo golpe el cigarro de la mano para así tirarlo al suelo y apagarlo por completo con la suela de su zapato.
—No fumes aquí —fue lo único que dijo mientras ambas intentaban entrar a la escuela.
Veía a varios chicos con sus familias, todos se encontraban nerviosos y con sonrisas en sus rostros, todos demasiado emocionados de por fin poder terminar esta etapa tan importante de sus vidas. Olivia se sintió algo triste, sabía que ella no había logrado graduarse junto a ellos, incluso el poco tiempo que pasó en Midtown High le traía nostalgia
