under grand hotel || double b

9. «Tinta»

(Alcaide: Él que está a cargo de la prisión. )

─ ¿Yunhyeong? ¿Qué pasa con él?

─ Lo despidieron  ─ Respondió Bobby con simpleza. No era que le importara demasiado pero quería iniciar una conversación con el menor, a ver si se le pasaba el enojo por haberlo grabado mientras follaban.

─ ¿Por qué? Era chismoso, pero era buen médico.

─Se acostaba con el hijo del Alcaide.

Hanbin había visto un par de veces al chico, tenía unos ojos enormes pero parecía asiático en alguna medida. Venía ver a su padre cada fin de semana, custodiado por miles de guardias, ya que los reos siempre se lo devoraban con la mirada. ¿Quién diría que el médico sería el más peligroso?

─ ¿La esposa del Alcaide era asiática?

─ No, Chanwoo es adoptado, sin embargo era todo para el Alcaide. ─ contestó el mayor. ─ Imagínate lo que significó para él encontrarlos follando en la enfermería.

─ ¿Es por eso que el Alcaide renunció?

─ Sí, se lleva a Chanwoo lejos, pero dudo que los pueda separar tan fácilmente. Esos dos cogían desde antes que yo llegara a la prisión, me sorprende que duraran tanto sin ser descubiertos.

─ ¿Y tú como sabes eso?  ─ indagó Hanbin.

─ El día que llegué a la prisión intentaron apuñalarme. Me corté la mano y fui a la enfermería a que me la vendaran, pero cuando entré no había nadie y se escuchaban un montón de gemidos desde el baño. ─ Bobby sonrió lascivamente perdiéndose en recuerdos. ─ No los delaté, porque me dieron la mejor de las bienvenidas...    

Hanbin le lanzó un zapato directo a la cara desde la litera superior, todas las historias de Bobby terminaban igual.

─ Hoy tampoco me tocas. ─ Avisó el menor. Bobby comenzó a maldecir en voz baja antes de girarse para dormir.

∞

─ Bienvenido a Under Ground Hotel. ─ El oficial a cargo le daba las cordiales bienvenidas al nuevo Alcaide, que observaba todo con soberbia tranquilidad. ─ Este es el gimnasio, cada prisionero es responsable de su actividad física. ─ Le indicaba. Mostrándole las máquinas y guiándolo en medio de una cancha de baloncesto. ─ Desde que la actividad sexual fue prohibida, la tensión es eliminada a través del ejercicio.

─ Escuché que un hombre fue asesinado aquí hace poco... ─ Comentó el Alcaide.

─ Sí...era un jefe de la mafia china. ─ respondió reacio.

─ ¿Y el responsable? ─ Indagó el recién llegado.

─ El asunto ya está siendo investigado. ─ Contestó el oficial restándole importancia.

Seunghyun frunció el ceño, ya iba entendiendo como funcionaban las cosas en ese lugar.

─ ¿Quién es el mandamás actual? ─Preguntó observando a su alrededor. Un chico de ojos rasgados que jugaba al basket llamó su atención, su presencia era intimidante.

─ Es él. ─ Indicó el guardia. ─ Prisionero OX107, Bobby.

Una luz en la oscuridad.

∞

─ ¡Hey Hanbin! ¿Aún sigues peleando con Bobby? ─ Preguntó uno de los reos desde su mesa. Hanbin iba camino a las duchas, sólo con una toalla que cubría su hombría. Después de tanto tiempo en Under Ground Hotel, ya no se sentía intimidado por nadie.